■ Sindicatos contribuyen al fracaso de la iniciativa de Berlusconi
Alitalia, a un tris de la quiebra; rompe con grupo empresarial
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Trabajadores rechazaron que Alitalia sea comprada por CAI
Foto: Ap
Roma, 18 de septiembre. La aerolínea italiana Alitalia se encuentra ante una posible liquidación, luego que el grupo de empresarios que lanzó un plan para rescatarla retiró su oferta este jueves al no haber podido convencer a los sindicatos de aceptarla.
Los miembros del consorcio CAI votaron por unanimidad el retiro de la oferta, en lo que representa un duro golpe para el primer ministro, Silvio Berlusconi, quien usó sus conexiones de negocios y poder político para persuadir a los inversores a salvar la aerolínea y mantenerla en manos de italianos.
“La situación es dramática y podríamos caer al abismo”, señaló Berlusconi a periodistas. Al ser consultado sobre si eso significaba la quiebra de la aerolínea, se limitó a contestar: “Veremos”.
Augusto Fantozzi, gerente especial asignado por el gobierno, había advertido varias veces que comenzaría el proceso de liquidación de la aerolínea si se caía la oferta de CAI.
El consorcio de inversionistas italianos indicó que había retirado su oferta luego que seis de los nueve sindicatos de Alitalia se rehusaron a firmar el plan de rescate, que estaba dirigido a salvar sólo las partes rentables de la aerolínea.
Pérdidas diarias
El grupo argumentó que la aerolínea tiene una problemática situación financiera. Alitalia pierde 2 millones de euros (2.9 millones de dólares) diarios.
“La dramática situación de Alitalia y de los mercados internacionales no permite alargar más una oferta que se ha profundizado y que ha llevado a numerosas concesiones”, dijeron en un comunicado el grupo de 16 empresarios, encabezados por Roberto Colaninno, número uno de Piaggio.
En tanto, el ministro de Trabajo italiano, Maurizio Sacconi, señaló que el retiro “pavimenta el camino para la caída de todas las compañías del grupo Alitalia” y calificó como “absurda” la posición de los sindicatos que rechazaron el plan de rescate.
Un líder de uno de los tres mayores sindicatos manifestó que el retiro de CAI traerá “una catástrofe social. La compañía está muerta y algunos de mis colegas querían su adquisición”, agregó Luigi Angeletti, jefe del sindicato UIL.
La agrupación de pilotos ANPAC, que estaba opuesto al plan de CAI de cerrar miles de empleos y recortar salarios, manifestó que más negociaciones podrían haber llevado a un compromiso.
“Es una vergüenza. En mi opinión las condiciones estaban allí para un acuerdo. Ahora, ellos (CAI) están fuera y nosotros todavía adentro con nuestros problemas extremadamente serios”, sostuvo Fabio Berti de ANPAC a periodistas.
CAI proponía comprar las partes rentables de la firma antes de relanzarla como una aerolínea regional y más pequeña. Además serían despedidos unos 3 mil 250 de sus 20 mil empleados.
Alitalia, un símbolo nacional por más de 60 años, ha sufrido por interferencia política, problemas laborales y, más recientemente, por la subida de los costos de los combustibles y la desaceleración económica mundial que ha afectado al sector de viajes y turismo.
Hasta el Papa Benedicto XVI, quien al igual que sus predecesores vuela en Alitalia para sus viajes al exterior, dijo la semana pasada que estaba rezando por la aerolínea.