■ Hay 88 ex represores sin custodia eficaz
Detienen en Argentina a dos policías por la fuga de Corres
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Imagen del festejo de defensores de los derechos humanos en Córdoba, Argentina, el pasado 24 de julio, tras el fallo histórico en que fue condenado el general Luciano Benjamín Menéndez, represor durante la pasada dictadura, quien tendrá que cumplir cadena perpetua en una prisión común
Foto: Ap
Buenos Aires, 28 de julio. La justicia ordenó la detención de dos policías sospechsos de haber apoyado la fuga del ex teniente coronel Julián Corres, al que apodaban Laucha, procesado por diversos crímenes de lesa humanidad durante la pasada dictadura militar(1976-1983).
Esta fuga de una sede policial en la ciudad sureña de Bahía Blanca, alertó a la justicia y a los organismos de derechos humanos porque hay otros 88 ex represores de la dictadura detenidos en lugares sin custodia suficiente.
El edificio policial del que se fugó Corres no tenía custodia exterior y desde 2000 no funcionaba una cámara de seguridad que pudo haber registrado la fuga.
El fiscal federal Hugo Cañón ordenó la detención del inspector policial Juan Carlos Lastra y el cabo primero Pablo Alejandro Carbajal, a cuyo cargo estaba el detenido al fugarse cuando supuestamente lo habían llevado al baño en la madrugada.
Esto sucede pocos días después de la condena a cadena perpetua y cárcel común al general Luciano Benjamín Menéndez, que como jefe del Tercer Cuerpo del Ejército con sede en Córdoba, mantuvo bajo el terror a otras nueve provincias durante la pasada dictadura.
Este jefe militar estuvo detenido en 1987, pero no fue juzgado por la amnistía decretada por el ex presidente Carlos Menem en 1989 y que mantuvo relaciones muy fuertes durante los años 80 y 90 con políticos y miembros de la Iglesia Católica, mientras disfrutaba de la impunidad.