■ El Museo Madame Tussauds se inauguró con un Hitler de cera como pieza estrella
“Berlín es la urbe más interesante de Europa”, dice académico de EU; abren nueva embajada
Berlín, 3 de julio. A un día de la inauguración de la nueva embajada de Estados Unidos en el corazón de la capital alemana, voces autorizadas se encargan de destacar que desde la perspectiva de ese país, Berlín es la capital de la cultura europea.
La nueva embajada es uno de los proyectos edilicios más caros y ambiciosos de los años recientes y sus necesidades de seguridad alterarán la zona que rodea la célebre Puerta de Brandenburgo, uno de los puntos de mayor afluencia turística de la capital alemana.
“Para Estados Unidos, Berlín es la ciudad más interesante de Europa”, sostuvo Gary Smith, director de la American Academy, institución que entre sus becarios tuvo a Arthur Miller, dramaturgo y escritor estadunidense, hijo de una familia de inmigrantes judíos polacos.
Con la inauguración de la nueva embajada, “los lazos entre Alemania y Estados Unidos se reforzarán”, precisó.
Efigie acordonada
En Berlín, el nuevo Museo Madame Tussauds presentó este jueves la figura en cera de Adolfo Hitler, sentado detrás de una mesa dentro de su búnker, como pieza estrella, no obstante las críticas –como informó La Jornada el pasado 12 de junio– cuando esa efigie no había sido concluida y que recrea al führer poco antes de su suicidio y de la derrota de la Alemania nazi en la Segunda Guerra Mundial.
Los críticos consideraron inapropiado exhibir al dictador nazi –quien ordenó el exterminio de los judíos de Europa–, junto a celebridades, estrellas de pop, presidentes del mundo y héroes deportivos.
“Por supuesto la figura despertará interés, pero esperamos que las personas sepan que es parte de una exhibición”, dijo Meike Schulze, directora de Midway Atractions en Alemania, instancia responsable del Museo Madame Tussands. “Sería una vergüenza si esto domina todo”, agregó.
Schulze defendió la decisión de incluir a Hitler en la muestra, ya que la investigación de mercado mostró que había demanda para su exhibición siempre que su retrato fuera “sensible”.
En Alemania, exhibir símbolos nazis y piezas de arte que glorifiquen a Hitler es ilegal. Por ello, la efigie está acordonada para evitar que los visitantes posen con él.