■ Desde que se coronó en 1996, sólo había conseguido tres empates y tres derrotas

Doblete de Podolski regresa a Alemania al triunfo en una Eurocopa, tras 12 años

■ Esta victoria no me da una alegría desbordada, expresó el delantero de origen polaco

Agencias

Klagenfurt, Austria, 8 de junio. Un doblete de Lukas Podolski dio a Alemania un buen inicio en la Eurocopa con una trabajada pero merecida victoria de 2-0 sobre Polonia, en un encuentro del grupo B jugado ante 32 mil espectadores. Los polacos debutaron con una derrota en esta competencia y siguen sin conocer el triunfo sobre los teutones.

Podolski, de origen polaco, fue el hombre que cumplió con el objetivo planteado de entrada por el entrenador Joachim Löw: ganar el primer partido del torneo como piedra fundamental para una exitosa campaña.

El delantero anotó en los minutos 20 y 72, que significaron el primer triunfo alemán en una Eurocopa después de 12 años. Desde que salió campeón, en 1996, en los dos torneos posteriores Alemania sólo había cosechado tres empates y tres derrotas.

Podolski, delantero suplente en su equipo, el Bayern Munich, fue el jugador que rompió el equilibrio, a los 20 minutos, al aprovechar una falla de la defensa polaca que buscaba dejar en posición fuera de juego a Miroslav Klose y al propio Podolski.

En una jugada de dos naturalizados alemanes nacidos en Polonia, Klose sirvió en bandeja a Podolski, quien sólo empujó el balón sobre la línea.

Fue necesario ver la repetición por la televisión para verificar en cámara lenta que efectivamente la jugada era fuera de lugar, pero ya era tarde para cambiar el rumbo. El árbitro noruego Tim Ovrebo lo había visto de otra forma.

Alemania dominaba el partido, sobre todo por las ventajas que sacaba gracias a la velocidad que imprimían por las bandas Podolski, hoy alineado como centrocampista por izquierda y no como delantero, y Clemens Fritz, por derecha, el mejor jugador hasta que salió en la segunda parte, lesionado.

El entrenador de Polonia, Leo Beenhakker, ingresó en la segunda mitad a Roger Guerreiro, brasileño naturalizado polaco hace apenas un mes, quien juega en el Legia, de Varsovia, desde 2005 después de haber pasado por el Corinthians, el Flamengo y el Celta de Vigo. Empezó bien y sirvió para que de pronto los polacos, en su primer partido en una Eurocopa, empezaran a jugarle de igual a igual al tricampeón europeo. Pero no bastó para dar vuelta al destino.

La definición llegó a los 72 minutos, cuando Podolski se encontró dentro del área con un balón perdido que no había podido conectar Klose, y fulminó con un zurdazo al portero Artur Boruc.

Polonia sigue sin ganar

El 2-0 confirmaba el historial. En el decimosexto partido entre ambos, Polonia jamás ha podido vencer a sus poderosos vecinos, con apenas cuatro empates.

Aunque sin brillar, Alemania confirmó con la victoria que es un equipo a tener en cuenta a la hora de hacer las cuentas finales, mientras los polacos deberán ajustar líneas para su choque de vida o muerte ante el anfitrión Austria, que también perdió.

Tras marcar un doblete en el ámbito internacional, cualquier goleador estaría ya festejando. Sin embargo, Podolski se mostró cauto y un poco triste por haber hundido a la selección del país que lo vio nacer. “Esta victoria no me da una alegría desbordada porque soy de origen polaco y toda mi familia está allá. Tengo dos corazones, uno alemán y otro polaco”, admitió el mejor jugador joven del Mundial 2006.

Luego, dio paso a su carácter más profesional, ese que construyó en la Bundesliga. “Hicimos lo que teníamos que hacer: ganar el primer partido de la Eurocopa”, acotó.

Por su lado, el capitán de la Mannschaft, Michael Ballack, destacó la concentración del equipo, que siguió el esquema táctico planteado por el seleccionador Löw al pie de la letra.