El VIH tiene un rostro femenino que algunas veces ha sido
ocultado. Es ese silencio alrededor de la infección el que
provoca que miles de mujeres alrededor del mundo contraigan
el VIH de sus parejas.
Sonia, Paola, Bárbara, Mari, Martina y Francisco, de la
organización Colectivo Sol —a través de La Condomóvila,
proyecto surgido en el año 2007— se dirigen a las mujeres
para brindarles información en materia de salud sexual y
reproductiva, derechos sexuales y reproductivos, el uso del
condón masculino y femenino y la negociación de su uso por
medio de pláticas entre iguales, es decir, de mujer a mujer.
Su objetivo al recorrer los municipios de Nezahualcóyotl,
Chimalhuacán, Chalco, Ecatepec, Los Reyes, La Paz e
Ixtapaluca, todos del Estado de México, es hablar con las
mujeres sobre cuestiones de género y explicar por qué es
difícil protegerse o qué pasa cuando se pide a la pareja que
utilice protección; también subrayan las maneras de reconocer
situaciones de riesgo, de las que muchas amas de casa
se sienten a salvo por el mito que dice que las ITS o el VIH
sólo afecta a mujeres con múltiples parejas, sin contemplar
la posibilidad de que su pareja estable las infecte.
A partir de este año, con el apoyo de Fundación Pfizer, La
Condomóvila podrá ampliar su labor de reparto de preservativos,
pláticas e impartición de mini talleres, ahora también
para mujeres que viven con VIH, en las que recibirán orientación
en materia de prevención secundaria.
Por medio de estas pláticas, mini talleres y juegos se busca
crear consciencia en las mujeres y que estas se conviertan
en replicadoras de la información obtenida para lograr un
cambio: que las mujeres se acerquen a pedir información
sobre salud sexual y sepan que tienen derecho a decidir
sobre su cuerpo y su sexualidad. (Leonardo Bastida Aguilar) |