■ Familiares inician plantón en Tuxtla Gutiérrez
Exigen la revisión de 33 procesos de condenados por el caso Acteal
Tuxtla Gutiérrez, Chis., 3 de junio. Esposas e hijos de 33 presos indígenas de Chenalhó, acusados de participar en la matanza de Acteal, iniciaron un plantón en esta capital para pedir a las autoridades judiciales federales que se revisen los procesos penales y formaron el comité en defensa de los presos. Explicaron que sólo una docena de los 78 detenidos que hay actualmente participaron en los hechos. Los asesinos confesos exculparon a los demás; sin embargo, todos fueron sentenciados en procesos penales llenos de irregularidades jurídicas, sostienen.
Un ejemplo –dijeron– es el de Bartolo Luna Pérez, aprehendido el 25 de diciembre de 1997, cuando el camión en el que viajaba fue interceptado por la multitud que llevaban a enterrar a los 45 muertos masacrados tres días atrás.
El anciano, ahora de 74 años de edad, fue bajado de forma violenta del camión por los policías estatales que custodiaban la marcha fúnebre. “Mi papá nada tuvo que ver con la masacre, no tenía por qué arriesgarse a que lo capturaran. Si hubiera sido responsable se hubiera ido al monte a esconder, pero no tenía por qué hacerlo, es inocente”, señaló su hija, Estela Luna, quien explicó que el anciano está sentenciado a 30 años de prisión.
La centena de personas que llegó este día a instalarse en la plaza central de la capital formó el llamado Comité de familiares y amigos de los inocentes presos del caso Acteal. La mayoría de los indígenas únicamente hablan tzotzil.
En un escrito que presentaron, detallan que luego de 10 años se ha llegado a esclarecer quiénes, de las más de 100 personas que fueron detenidas, realmente participaron en la masacre.