■ La región confirma su vitalidad, dijo el delegado general del encuentro Thierry Frémaux

Predomina el cine de América Latina en el Festival de Cannes

■ Ante la relevancia regional anterior se espera que en esta edición se logre la Palma de Oro

■ Sean Penn, activista y actor, encabezará el jurado de la versión 61 del certamen

De la redacción y Agencias

París, 10 de mayo. Con más de 20 películas seleccionadas, cuatro de ellas en competición por la Palma de Oro, el cine de América Latina ocupa un lugar de honor en el 61 Festival de Cannes (del 14 al 25 de mayo) y se apresta a desplegar, por tercer año consecutivo en esta cita, su condición de cinematografía de dimensión universal. “América Latina confirma su vitalidad”, declaró el delegado general del festival, Thierry Frémaux.

Tras dos ediciones con preeminencia mexicana en la selección oficial, corresponderá este año a los brasileños Fernando Meirelles, Walter Salles y Daniela Thomas, así como a los argentinos Pablo Trapero y Lucrecia Martel, representar al cine latinoamericano en la competición por la Palma de Oro.

Después de dos años en que varios filmes latinoamericanos figuraron en el palmarés de Cannes (Luz silenciosa, del mexicano Carlos Reygadas; Ver llover, de la mexicana Elisa Miller, y XXY, de la argentina Lucía Puenzo, en 2007; Babel, del mexicano Alejandro González Iñárritu, y Primera nieve, del argentino Pablo Agüero, en 2006), quizá ésta sea la ‘tercera vez va la vencida’ para que la codiciada Palma de Oro corone a un director de la región.

Fernando Meirelles tendrá los honores de la gala de apertura del festival, en la que presentará su película La ceguera, basada en una obra del premio Nobel portugués, José Saramago.

Lucrecia Martel, que fue miembro del jurado del certamen en 2006 y compitió por la Palma de Oro en 2004 con La niña santa, lo hará esta vez con Mujer sin cabeza, mientras su compatriota Pablo Trapero, autor de Mundo grúa y El bonaerense, concurrirá con Leonera. Walter Salles, asiduo participante del Festival de Cannes, en el que presentó Diarios de motocicleta y del que fue miembro del jurado en 2002, presentará Linha do Passe, que dirigió junto a Daniela Thomas, con quien compartió ya la dirección de Tierra extranjera.

Los cuatro filmes latinoamericanos competirán con otras 18 obras, entre ellas, cintas de directores de la talla de Clint Eastwood, que presenta Changeling, Wim Wenders con The Palermo shooting o Steven Soderbergh, cuyo filme Che, sobre la vida de Ernesto Guevara, encarnado por Benicio Del Toro, aportará su grano de arena a la tonalidad latinoamericana de la selección. También lo hará el documental Maradona, de Emir Kusturica, éste presentado fuera de competición.

En la sección Una cierta mirada se presentan Los bastardos, del mexicano Amat Escalante –descubierto hace tres años en esta misma sección con su primer largometraje, Sangre– y A festa de la menina morta, de Matheus Nachtergaele, actor brasileño que debuta como director con este filme.

La sección Quincena de los realizadores seleccionó no menos de cinco películas latinoamericanas: Tony Manero, del chileno Pablo Larraín; Acné, primera obra del uruguayo Federico Veiroj; Liverpool, del argentino Lisandro Alonso; Salamandra, del argentino Pablo Agüero, y el cortometraje Muro, del brasileño Tiao.

En la selección de la Semana de la crítica figura en competición La sangre brota, del argentino Pablo Fendrik y, como película de clausura Desierto adentro, del mexicano-uruguayo Rodrigo Plá.

En el capítulo de cortometrajes, la Semana seleccionó el franco-mexicano Beyond the Mexican Bay, de Jean-Marc Rousseau; el brasileño Areia, de Caetano Gotardo, el argentino-paraguayo Ahendu nde sapukai (Oigo tu grito), de Pablo Lamar; el brasileño A espera, de Fernanda Teixeira, y el mexicano El deseo, de Marie Benito, estos tres últimos en competencia.

A ello hay que agregar Lake Tahoe, del mexicano Fernando Eimbcke, programada en tanto Revelación FIPRESCI; Mi vida dentro, de Lucía Gaja, y Peces plátano, de Natalia Beristain, dentro de la sesión dedicada al palmarés del Festival de Morelia.

Las películas de Nachtergaele, Veiroj y Agüero son otras tantas posibilidades latinoamericanas de figurar en el Palmarés de Cannes, puesto que, en tanto que primeras obras, concursan por la Cámara de Oro, premio destinado a coronar una opera prima de cualquiera de las secciones del festival.

El jurado

Sean Penn, el ex “chico malo” de Hollywood, rescatista en Nueva Orleáns tras el paso de Katrina, opositor al embargo contra Cuba, corresponsal de las elecciones de Irán en 2005 y observador del presidente Hugo Chávez en 2007, presidirá el jurado del 61 Festival de Cannes. Penn asume esta tarea a los 47 años, con la reputación de ser un cineasta tan sólido como maduro, que ha demostrado versatilidad como actor, virtuosismo como director y compromiso como artista.

Así, el hombre cuatro veces nominado al Óscar y acreedor de una estatuilla en 2004 por su protagónico en Río místico, encabeza a los ocho jueces donde también figuran el director mexicano Alfonso Cuarón, el actor y también director italiano Sergio Castellitto, la estadunidense Natalie Portman, la actriz alemana Alexandra Maria Lara, el cinerrealizador tailandés Apichatpong Weerasethakul, el productor francés Rachid Bouchareb, la directora iraní Marjane Satrapi y la actriz francesa Jeanne Balibar.

“Cannes es desde hace mucho el epicentro mundial del descubrimiento de nuevas olas de directores, por lo que estoy ansioso por participar este año como presidente del jurado”, dijo Penn en enero, cuando recibió la invitación los directivos del encuentro.