■ “Mujer de poder y de letras”, dicen
Rinden tributo a Griselda Álvarez en Bellas Artes
Es un referente de la historia política mexicana por haber sido la primera gobernadora de un estado de (Colima, de 1979 a 1985).
“Mujer de poder, mujer de letras. Empeñosa, estudiosa, pretenciosa, paradigmática y feminista. Mujer alejada de los dogmas”, así fue definida la también ensayista, narradora y poeta Griselda Álvarez (Guadalajara, 1913), a quien ayer se rindió un homenaje en una abarrotada sala Manuel M. Ponce, del Palacio de Bellas Artes, donde en su ausencia por motivos de salud, su hijo Miguel Delgado Álvarez y su nieta, recibieron en su nombre la Medalla de Oro de Bellas Artes.
En el acto Teresa Franco, titular del Instituto Nacional de Bellas Artes, Patricia Galeana, Silverio Cavazos Ceballos, gobernador de Colima y Miguel Ángel Aguayo, rector de la universidad de ese estado, entre otros, coincidieron en destacar los anhelos, convicciones, esfuerzos, ética y trayectoria que llevaron a Griselda Álvarez a ser una reconocida “mujer de poder y de la literatura mexicana”, en particular como poeta y sonetista.
Se aprovechó la ocasión para también presentar el libro Griselda Álvarez: imágenes en el tiempo, editado por la Universidad de Colima, en el que el escritor Francisco Blanco Figueroa, además de realizar la semblanza de la autora, reúne una serie de textos y fotografías inéditas para conformar una biografía de la carrera política y su paso por las letras de la maestra Álvarez.