■ El líder religioso puede visitar Taiwán, dice el presidente electo
El Dalai Lama quiere tomar los Juegos Olímpicos “como rehén”: prensa china
Pekín, 23 de marzo. La prensa china acusó hoy al Dalai Lama de querer “tomar como rehén” a los Juegos Olímpicos del verano próximo y “forzar al gobierno de China a ceder en la cuestión del Tíbet”.
“Poco importa que el Dalai Lama y sus seguidores utilicen el pretexto de la paz; sus actividades de sabotaje que persiguen la separación están abocadas al fracaso”, señaló el Diario del Pueblo, órgano del Partido Comunista Chino, en referencia a las protestas del 10 y 11 de marzo en Lhasa.
El Periódico del Ejército Popular de Liberación y otros rotativos de menor circulación abordaron el tema para destacar que en los últimos 50 años han ocurrido actos violentos cuyo objetivo ha sido impulsar la separación de Tíbet.
Las manifestaciones en Lhasa han dejado saldo de 19 muertos, según las autoridades chinas, pero el autoproclamado gobierno en el exilio de Tíbet afirma que hubo “99 decesos confirmados”.
El gobierno chino informó hoy que un total de 94 personas resultaron heridas en los últimos 13 días en disturbios ocurridos en la región de Gannan, provincia de Gansu. Hubo otros enfrentamientos en Aba, provincia de Sichuan, pero las autoridades no dieron a conocer un balance sobre lesionados. Según las organizaciones en el exilio, 39 manifestantes murieron en choques con policías y militares.
En Taiwán, el territorio insular que Pekín considera una provincia rebelde, el político opositor Ma Ying-jeou, presidente electo en los comicios del sábado con 60 por ciento de los votos, afirmó que el Dalai Lama sería bienvenido si decide visitar la isla que desde 1949 proclamó su separación de la República Popular China, sin declararse abiertamente como Estado soberano.
Ma se mostró al mismo tiempo interesado en mejorar las relaciones con Pekín y crear un mercado común, sin dejar de insistir en el objetivo de ser miembro de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
Además de las elecciones presidenciales, los ciudadanos de la isla debieron votar sobre el ingreso a la ONU con el nombre de Taiwán, pero la participación fue insuficiente para tomar en cuenta el resultado. Hasta 1971, este país estuvo representado en el organismo como República de China.