Protestan por aniquilación de canguros
Sydney, 15 de marzo. Activistas defensores de animales en Australia se declararon hoy escudos humanos y prometieron impedir a las autoridades que sacrifiquen a cerca de 400 canguros que se encuentran en una base militar en Canberra.
El gobierno australiano ordenó que a los animales se les disparen dardos tranquilizantes y luego los maten con una inyección letal, con el argumento de que se multiplicaron de tal forma en la base militar que podrían morir de hambre.
“Estamos decididos a evitar que se mate a los canguros”, dijo el organizador de la protesta, Pat O’Brian. “Nos interpondremos entre ellos y los dardos, si es necesario”, aseguró el presidente de la Asociación de Protección de Animales Salvajes en el país.
Los debates en torno a los canguros tienen lugar desde hace años en Australia. El ejército propuso en un principio matarlos a tiros, pero después, debido a las protestas, elaboró el plan para aturdirlos, transportarlos en vehículos acondicionados y llevarlos lejos de la capital del país a un lugar donde tengan suficiente alimento. O’Brian pidió hoy que el gobierno aplique este plan.
Sin embargo, los altos costos que implicaba la medida fueron criticados por ser equivalentes a un boleto de avión por todo el mundo para cada uno de los canguros. El plan fue finalmente rechazado por las autoridades.
El ministro de Medio Ambiente, Peter Garrett, se mostró impasible en los recientes días por las protestas, mientras el portavoz de la asociación de derechos animales RSPCA Canberra, Michael Linke, manifestó su preferencia por la solución de dispararles, al considerar que su relocalización sería demasiado traumática para ellos.
Se calcula que en Australia hay hasta 80 millones de canguros en un país de unos 20 millones de habitantes.