Primera campeona mundial de AL

Laura Serrano deja el boxeo por la maternidad

Me faltó pelear en mi país, ante mi gente, dijo

Jorge Sepúlveda Marín

Laura Serrano, primera campeona mundial de boxeo de América Latina, se retira de los cuadriláteros para dar paso a la conquista de una nueva faceta en su vida: la maternidad.

La púgil, quien no sólo combatió arriba de los cuadriláteros por espacio de 14 años, sino que cabeceó, hizo bending y debió conectar uno que otro uppercot por los vericuetos de la administración pública, hasta lograr que se aprobara el llamado boxeo rosa en la capital del país, recibió con alegría la noticia de su embarazo.

En las instalaciones de La Jornada, la llamada Poeta del Ring, quien vivió cinco años en Las Vegas, dijo que se retira del encordado contenta, pero no satisfecha del todo, porque dejó de cumplir objetivos, como “pelear en mi país, ante mi gente”, además de no desplegar su pugilismo en la considerada meca del boxeo, el Madison Square Garden, de Nueva York.

Abogada de profesión, boxeadora por convicción y poeta por pasión, apunta que bien le haría al pugilismo del país mayor orden y compromiso entre mánagers y boxeadores; “que firmen y respeten sus contratos”, y eviten la piratería, cánceres del medio, define.

Se sabe afortunada de colaborar en la actual Comisión de Boxeo Profesional del Distrito Federal (CBPDF) al lado de gente experimentada como el ex monarca del orbe Rafael Herrera y el anunciador Marlon Gurezpe, además de otros compañeros que “siento, tienen el deseo real de ayudar a que el boxeo de este país cambie, que se limpie de una vez por todas, que sea mejor”.

A Serrano, quien suma una hoja de servicios pugilísticos de 17 victorias; seis nocauts, cuatro reveses y dos empates, le gustaría no sólo “ser la mejor mamá del mundo”, sino promover boxeadoras, regresar al ejercicio de su profesión, probar suerte como mánager y dirigir algún día el deporte.