Investigadores usan la información de fumigadores
Nueva estrategia de bajo costo para combatir mal de Chagas
Londres, 27 de diciembre. Una nueva estrategia de control de bajo costo podría facilitar a los países pobres la detección y el tratamiento de la enfermedad de Chagas, una condición letal generada por un parásito que se halla fundamentalmente en Sudamérica, indicó un estudio.
La lucha contra la dolencia suele focalizarse en campañas de rociamiento para exterminar al insecto que transporta al parásito causante del padecimiento, que afecta a unas 11 millones de personas en el continente americano.
Pero un equipo de investigadores de Estados Unidos mostró que se puede usar información fácil de recolectar sobre la cantidad de insectos que se encuentran en los hogares, obtenida durante las campañas de rociamiento, para identificar grupos de niños en riesgo que deberían ser controlados.
Esto luego permite a los funcionarios de salud atacar mejor la enfermedad, actualmente en aumento en zonas urbanas, sin tener que evaluar a toda la comunidad, señaló Michael Levy, experto de los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos, quien dirigió la investigación.
“Los fumigadores nos están diciendo qué niños necesitan ser examinados”, expresó Levy, quien también trabaja para los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés). “Esto es muy sencillo de añadir a los programas existentes”.
La enfermedad de Chagas generalmente se transmite a los humanos por conducto de un insecto que succiona la sangre, denominado vinchuca, que transporta al parásito Trypasonoma cruzi. Este parásito causa más muertes al año en América Latina que cualquier otra condición parasitaria, incluida la malaria, agregó Levy.
Plan en dos pasos
Una vez infectadas, las personas pueden vivir con la enfermedad por años antes de que aparezcan los síntomas, lo cual dificulta la posibilidad de atacarla lo antes posible, manifestó el investigador.
En el estudio, los expertos evaluaron a 433 niños de un barrio pobre de Arequipa, Perú. El equipo comenzó analizando a los chicos de los hogares donde los fumigadores habían encontrado la mayor cantidad de bichos. Luego, cuando hallaron a un niño infectado, controlaron a todas las personas que habitaban en un radio de 20 metros y encontraron que quienes tenían la enfermedad vivían en grupos reducidos, según el artículo publicado en la revista PloS Neglected Tropical Discases.
“Comenzamos con los chicos que vivían en ambientes con muchos insectos y sólo analizamos a quienes habitaban en los alrededores de la zona donde había niños infectados”, contó Levy durante una entrevista telefónica. “Es una estrategia en dos pasos”.
Esto brinda a los funcionarios de salud de los países pobres mejores posibilidades de administrar los medicamentos necesarios para salvar el mayor número de vidas, expresó el autor.
Si bien la estrategia no identificaría todos los casos, los investigadores detectaron 83 por ciento de las infecciones con sólo evaluar un cuarto de la población total, concluyó Levy.