Señalan ONG modificaciones al proyecto original
Empresas lograron introducir cambios en ley sobre el tabaco
Ampliar la imagen Grupos ambientalistas denunciaron la modificación de la ley sobre el tabaco en favor de industriales Foto: Carlos Ramos Mamahua
Entre ocho y 10 modificaciones sufrió la iniciativa original de creación de la Ley General para el Control del Tabaco, que fue aprobada por la Cámara de Diputados. El resultado es un proyecto deficiente que incumple los compromisos firmados por México en el convenio marco promovido por la Organización Mundial de la Salud (OMS), afirmaron organizaciones civiles antitabaco.
Alejandro Madrazo, integrante de la Fundación Interamericana del Corazón, aseguró que en la minuta enviada al Senado se observa claramente “la mano de la industria tabacalera”, la cual logró introducir cambios sustanciales al proyecto original de la ley.
Resaltó la eliminación del artículo que daba a la Secretaría de Salud la facultad de proponer periódicamente medidas como el aumento de los impuestos de importación de los productos relacionados con el tabaco.
En conferencia de prensa, en la que también participó la Red de Organizaciones de la Sociedad Civil México sin Tabaco, Madrazo dijo que es poco, “pero es algo lo logrado”, y recordó que también se ha comprobado que el aumento de precio de los cigarros es la medida más eficaz para desalentar la adicción, principalmente entre los jóvenes. Sin embargo, la ley no lo prevé.
Señaló que la minuta aprobada en San Lázaro permite la publicidad y promoción de productos del tabaco, la que se supone se dirigirá “únicamente” a mayores de edad y a través de revistas para adultos.
Sin embargo, México se comprometió dentro del Convenio Marco para el Control del Tabaco (CMCT) a prohibir toda forma de publicidad, promoción y patrocinio de ese producto, señaló Madrazo.
Respecto a los “espacios 100 por ciento libres de humo”, también previstos en el CMCT, el artículo 27 de la ley establece que en los “lugares con acceso al público, o en las áreas interiores de trabajo, públicas o privadas (…) podrán existir zonas exclusivamente para fumar”.
Madrazo señaló que la industria tabacalera logró incidir en la decisión de los legisladores en éste y otros puntos de la minuta.
Refirió entonces el contenido del CMCT, en el que los países firmantes reconocieron la evidencia científica de que la exposición al humo de tabaco es causa de mortalidad, morbilidad y discapacidad, así como la obligación de adoptar medidas eficaces de protección a los no fumadores.
Otro tema en el que las tabacaleras lograron modificaciones es en el relativo a los pictogramas que deben colocarse en las cajetillas de cigarros. El CMCT establece que las imágenes y advertencias sanitarias deben ocupar 50 por ciento o más de las superficies principales expuestas y en ningún caso menos de 30 por ciento.
En tanto, la ley aprobada por los diputados y que será discutida en el Senado en febrero, se limitó a lo mínimo, dijo Madrazo, al plantear que las leyendas “deberán ocupar al menos 30 por ciento de la carea anterior, 100 por ciento de la cara posterior y 100 por ciento de una de las caras laterales del paquete y la cajetilla”. El activista resaltó que el proyecto original contemplaba no menos de 50 por ciento en cada lado.