Anula resultados y le exige devolver más de 700 mil dólares en premios
La IAAF confirma castigo de dos años a Jones por dopaje
El COI determinará en breve a quién entregará las cinco medallas que la estadunidense ganó
Si decide por la griega Thanou habrá otro escándalo
Ampliar la imagen Sobre la atleta Marion Jones pende también la amenaza de 10 años de prisión por falso testimonio Foto: Ap
Mónaco, 23 de noviembre. La Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo (IAAF, por sus siglas en inglés), confirmó la suspensión de la estadunidense Marion Jones durante dos años por su caso de dopaje, así como la supresión de sus marcas desde septiembre de 2000 y el retiro de sus cinco medallas olímpicas.
El castigo comenzó desde el 8 de octubre de 2007 y terminará el 7 de octubre de 2009, luego de que Jones confesó que se había dopado con el esteroide tetrahidrogestinona antes de los Juegos Olímpicos de Sydney 2000.
El caso de la atleta, a quien el presidente de la IAAF, Lamine Diack, definió hace un mes como “uno de los fraudes más grandes en la historia del deporte”, fue resuelto este viernes por el consejo directivo del organismo, el cual solicitó la devolución de la totalidad del dinero (más de 700 mil dólares) que la velocista ganó en premios.
El catálogo de sanciones incluye la descalificación de la estadunidense en todas las competiciones en que haya participado a partir del 1º de septiembre de 2000, así como la anulación de los resultados de la justa olímpica australiana, donde obtuvo medallas doradas en 100 y 200 metros y en el relevo 4x400, junto a preseas de bronce en salto largo y en la posta 4x100.
Jones ya devolvió al Comité Olímpico Internacional (COI) las preseas y el organismo deberá decidir qué hará con ellas. Si el oro en 100 metros fuera para la ganadora de plata, un nuevo escándalo se abriría, ya que se beneficiaría a la griega Ekaterini Thanou, quien cumple una sanción de dos años por eludir los controles antidopaje en Atenas 2004.
La confesión de Marion Jones, quien se declaró en bancarrota, llegó tras el acoso judicial a que fue sometida. Sobre ella pende la amenaza de 10 años de prisión por falso testimonio, así como el pago de 500 mil dólares de multas. El tribunal que la juzga dará a conocer su veredicto el 11 de enero de 2008.