Usted está aquí: viernes 16 de noviembre de 2007 Deportes Morelia cortó las alas al América; lo derrotó 3-0 y casi amarra su boleto

Al cierre

Horacio Cervantes, Mauricio Romero y Luis Angel Landín, los verdugos de las Águilas

Morelia cortó las alas al América; lo derrotó 3-0 y casi amarra su boleto

En fases finales el cuadro michoacano amplió su dominio sobre el de Coapa, que alineó a un combinado de titulares y juveniles

Los amarillos reciben el domingo a Monarcas en el Azteca

Notimex

Ampliar la imagen El defensa argentino Mauricio Romero festeja eufórico su anotación al conjunto de Coapa El defensa argentino Mauricio Romero festeja eufórico su anotación al conjunto de Coapa Foto: Ap

Morelia, Mich., 15 de noviembre. Morelia amplió su dominio en fases finales sobre América, al golear 3-0 a un cuadro combinado de titulares y juveniles, que anímicamente no logró reaccionar, en el juego de ida de la repesca del torneo Apertura 2007.

Horacio Cervantes, con un punterazo cerca de la media luna, abrió el marcador, al minuto 28, mientras el otro defensa central, el argentino Mauricio Romero, convirtió el segundo y Luis Angel Landín casi liquidó la eliminatoria al marcar el tercero, al 72.

Este resultado significó el tercer triunfo de Monarcas en cinco encuentros en fase final, a cambio de dos empates, ante unas Águilas que no tuvieron el buen juego que les dio el pase a la final de la Copa Sudamericana.

La escuadra de Coapa recibirá el próximo domingo a la michoacana, en el estadio Azteca, donde necesita vencer por tres anotaciones de diferencia para seguir con vida, pues su mejor posición en la tabla general por reglamento lo colocaría en la liguilla.

Morelia salió con sus titulares aunque con una sorpresa táctica de su técnico David Patiño. Dejó en la banca al volante Fernando Arce, pero el movimiento no funcionó del todo, porque el uruguayo Gabriel Choy, quien debió cubrir la tarea del seleccionado nacional, se mostró fuera de sintonía y fue sustituido al medio tiempo.

Su similar, Daniel Alberto Brailovsky, colocó de arranque a cuatro titulares habituales en zona baja: el arquero Guillermo Ochoa, José Antonio Castro, Duilio Davino y Oscar Rojas, combinados con los jóvenes Diego Cervantes y Rodrigo Íñigo, mientras el resto de su formación la completó con canteranos y el argentino Lucas Castromán.

Ambos cuadros comenzaron excesivamente cautelosos, con mucho orden en zona defensiva y sin buscar mucho el territorio rival, aparte que el elevado número de elementos dedicados a detener los escasos avances cumplió y disminuyó las emociones en un casi abarrotado estadio Morelos.

Juan Carlos Silva fue el motor que dio salida a los visitantes por la izquierda, mientras Castromán se estrelló varias veces en el muro defensivo de los de casa, por la derecha. Salvo un remate de Silva, que Adrián Aldrete desvió para que el esférico diera en el travesaño, fue poco lo que generó al ataque.

El juego había caído en una lucha sin un ganador en medio campo, cuando una acción de llano empezó a inclinar la balanza. Horacio Cervantes se fue al ataque; aprovechó que no salieron a marcarle y sacó un punterazo cerca de la media luna, que tomó por sorpresa a Ochoa, para el 1-0.

A partir de ese momento los anfitriones jugaron mejor, a la vez que el equipo de Brailovsky no encontró la manera de generar peligro sobre la meta defendida por Moisés Muñoz.

Cerca del final del primer tiempo, Monarcas amplió su ventaja con certero remate con la cabeza de Romero, quien ganó el duelo al capitán Davino dentro del área y metió el balón en el ángulo derecho, para el 2-0.

La desventaja en el marcador obligó al timonel americanista a mandar a dos hombres de mayor experiencia para el complemento, pero Juan Carlos Mosqueda y el charrúa Rodrigo López no impulsaron lo suficiente a su equipo para meterse al juego o llevarse una diferencia menor.

Monarcas amplió su delantera con otro remate con la cabeza de Landín, luego de que Diego Martínez fue hasta el fondo por la banda izquierda y puso servicio preciso para el ex tuzo, quien ganó el balón entre dos rivales y lo metió pegado al poste izquierdo sin que Ochoa pudiera detenerlo.

Los pupilos de Patiño pudieron conseguir un marcador más abultado, sólo que perdonaron en otras oportunidades claras.

 
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