El titular de la SCT dio banderazos de salida a naves de Aeromar y Delta Airlines

Inconclusa, ayer entró en operación la terminal dos del aeropuerto capitalino

Pendiente, el contrato con taxistas; exigen que se les reconozca “derecho de exclusividad”

Triunfo Elizondo

Finalmente, con un año de retraso a lo anunciado en repetidas ocasiones por Ernesto Velasco León, director general de Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA), ayer entró en operación la terminal 2 del Aeropuerto Internacional Benito Juárez.

El secretario de Comunicaciones y Transportes (SCT), Luis Téllez Kuenzler, dió el banderazo simbólico con el que un avión de Aeromar inició a las 7:14 horas el despegue para partir con destino final hacia la ciudad de Colima. Minutos después, a las 7:30, otro aparato, ahora de Delta Air Lines, también salió hacia Atlanta.

El singular “banderazo” fue escenificado por dos vehículos contra incendios, que cuando pasó el avión de Aeromar, con 43 pasajeros a bordo, lanzaron potentes chorros de agua, formando un círculo.

Aproximadamente 300 personas, entre invitados, funcionarios, empleados, camarógrafos, fotógrafos y reporteros, Téllez Kuenzler precisó que no se trataba de un acto inaugural, sino del inicio de aterrizajes y despegues de las dos líneas aéreas mencionadas, a las que se sumarán en enero y febrero de 2008, Aeroméxico, Aeroméxico-Conncet, Continental, Lan Chile, Lan Perú, Aerocaribe y Copa.

Previa a la puesta en marcha de esa nueva terminal del AICM, el titular de la SCT, acompañado de Velasco León, Héctor Velázquez Corona, Gilberto López Meyer, directores de ASA, del AICM, y de la Dirección General de Aeronáutica Civil, y otros funcionarios, llevó a cabo un recorrido tanto por las áreas nacional e internacional, por los espacios que ocupan los servicios de migración y de aduanas, por las zonas comerciales y de diversos servicios a los usuarios.

Las cifras no cuadran

Luego, en conferencia de prensa ex profeso, Téllez Kuenzler reiteró algunos datos que se han estado manejando periodísticamente desde hace algunos meses. Por ejemplo, que el costo de la obra fue de 8 mil 598.1 millones de pesos, aunque inexplicablemente varias veces hizo notar que el sólo edificio tuvo un costo de 3 mil 739 millones, como si el resto de lo invertido no contara.

Dijo que cuando las siete aerolíneas programadas para prestar sus servicios desde la terminal 2, del ciento por ciento de los pasajeros que hoy se atienden en la uno, el 43 por ciento pasará a la 2 y, que “la nueva le permite al AICM ampliar su capacidad de atención de 24 millones de pasajeros en 2006, a un potencial de 32 millones de pasajeros al año, además de brindar una mejor atención al descongestionar la uno”.

Sobre la capacidad de operación de aviones, luego de consultar a Velázquez Corona, Kuenzler dijo que actualmente los aterrizajes y despegues “andan cerca de las mil operaciones diarias y que con la terminal uno aumentarán en 13 por ciento”, o sea mil cien mínimo.

Al respecto, el diputado Jesús Ramírez Stabros, ex secretario general de la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores (ASPA), afirmó que el número de operaciones diarias no pueden se arriba de mil por día o 400 mil al año, con 13 por ciento aumentarían a más de 450 mil aterrizajes y despegues diarios, y el AICM no tiene la capacidad para atender ese volumen de acciones aéreas.

Por lo que se refiere al número de usuarios, dijo que llegará a los 32 millones y ya no habrá capacidad para más. Téllez Kuenzler, que en dos ocasiones había asegurado que aunque el AICM alcance toda su capacidad operativa dentro de ocho años, continuará funcionando por cien años más, molesto porque se le volvió a preguntar lo mismo, respondió: “Este aeropuerto estará funcionando ¡doscientos años más!”.

Por su parte, Velázquez Corona “aclaró” que la renovación del contrato para que el Sitio 300 siga operando en el aeropuerto capitalino “no se ha firmado, porque exigen que se les reconozca derecho de exclusividad”; sin embargo, al precisársele que esa organización, en repetidas ocasiones, ha dicho que piden respeto a su derecho de preferencia y no de exclusividad, visiblemente molesto guardó silencio.

No aceptó que funcionarios de ASA tengan interés en traer a otra empresa a competir libremente con el Sitio 300, agrupación que afirma que los directores de ASA y AICM están interesados en meter 400 nuevas unidades para “romper el monopolio del Sitio 300”. El problema radica en que anualmente los operarios de taxis del aeropuerto obtienen hasta 300 millones de pesos por su servicio.

Vía telefónica, Hugo Guerrero, presidente del Sitio 300, dijo que 200 carros estamos ya presentes en la terminal 2, para atender a los pasajeros que lleguen del exterior. Ya no nos vamos a retirar”.