Sostiene que la izquierda ha perdido la brújula en la máxima casa de estudios
La selección del rector de la UNAM, en la condición más oscura: Ordorika
A pesar de los cambios que hoy se advierten en el proceso de sucesión de rector en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), la Junta de Gobierno mantiene “en la condición más oscura” la definición del que representa uno de los temas más trascendentes de la institución y, de ese modo, “seguimos con el secreto y como en la Iglesia católica, esperando humo blanco”, apuntó el investigador Imanol Ordorika durante la presentación del libro La política azul y oro, del que Rafael López es coautor.
En el auditorio Mario de la Cueva, de la Torre II de Humanidades, se dieron cita algunos de quienes conforman el largo listado de actores de la vida universitaria que fueron entrevistados para escribir el libro: Salvador Martínez Della Rocca, Humberto Muñoz e Inti Muñoz, entre otros. Y entre los presentadores quedó como una verdad irrefutable que en la UNAM, pese a que lo nieguen los grupos de poder, existe la política.
Sin embargo, Ordorika coincidió con tesis como las de Roger Bartra, de que la izquierda ha carecido de proyecto en la UNAM, ha perdido la brújula y por el momento, en la actual coyuntura de cambio de rector, “no tenemos mucho qué decir”.
El autor sostuvo, durante una entrevista reciente a propósito del libro, que “la política universitaria es la de los grupos de poder y dominantes en la que se aglutina toda la estructura de la Junta de Gobierno, del Colegio de Directores y de todo lo que conforma la aristocracia universitaria, entes en los que destaca el control sobre el Consejo Universitario, el carácter cerrado de los procesos de la propia junta y el hecho de que las grandes decisiones las tomen muy pocas personas”.
En esa misma conversación con La Jornada, el integrante del Instituto de Investigaciones Económicas dijo que en la coyuntura de cambio de rector en la UNAM, la disputa en el seno de los grupos hegemónicos se debe a la inexistencia de una visión homogénea de la institución: “eso nos explica porqué los sarukhanistas se pelean con los delafuentistas”. Ambos, añade Ordorika, comparten los preceptos legales y las formas tradicionales de la universidad, pero tienen matices en torno al proyecto universitario que quieren encabezar, tienen intereses diferentes y quieren ocupar los espacios de manera diferenciada”.
En la presentación de ayer participaron además los doctores Roberto Rodríguez, Teresita de Barbieri y el propio Roger Bartra.
En su intervención, Bartra dijo que si bien casi todo mundo sostiene que no es el momento de poner en manos de una Cámara de Diputados conflictiva y de muy bajo nivel las modificaciones que necesitaría la Ley Orgánica de la UNAM”, este es el momento de ejercitar la autonomía –“en cierto sentido en la soledad”– y demostrar que es posible, con leyes arcaicas, encontrar salidas modernas y sobre todo democráticas a la institución.