Sacará del primer cuadro 2 mil 500 microbuses y readecuará el transporte de carga

Pondrá el GDF orden en el caos vehicular del Centro Histórico

Podrán circular sólo las rutas que tengan como origen-destino esta zona de la ciudad: Setravi

Ángel Bolaños Sánchez

Así como lo hizo con los vendedores ambulantes, ahora el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard Casaubon, se propuso sacar de las calles del perímetro A del Centro Histórico los microbuses que cruzan por la zona y reordenar el transporte de carga.

El secretario de Transportes y Vialidad (Setravi), Armando Quintero Martínez, dijo que cruzan por las calles del casco viejo de la ciudad alrededor de 2 mil 500 microbuses de 50 rutas durante la mayor parte del día, y las que no tengan como origen-destino el Centro Histórico deberán circular por las vialidades primarias colindantes.

“Hemos iniciado los contactos con los dirigentes de estas rutas, a efecto de construir las alternativas, y calculamos que antes de que finalice este año debemos tener ya un acuerdo para su reubicación, de tal manera que por aquí solamente pasen las rutas que estrictamente tengan origen y destino el Centro Histórico”, señaló el funcionario capitalino.

Durante un recorrido por la calle Bolívar, previo a su reapertura una vez que concluyeron los trabajos de rehabilitación, el mandatario capitalino dijo que su gobierno no sólo tiene la responsabilidad de cuidar el espacio público y vigilar que el comercio informal no invada nuevamente las áreas que corresponden a los peatones, sino de poner orden también al desorden vehicular.

“No quiero que pasen tantas rutas por aquí, más que las que tienen como destino el Centro Histórico”, dijo Ebrard a Quintero Martínez en el recorrido, donde estuvo acompañado también por los secretarios de Seguridad Pública, Joel Ortega Cuevas, y de Obras y Servicios, Jorge Arganis Díaz Leal, la titular de la Autoridad del Centro Histórico, Alejandra Moreno Toscano, así como vecinos y comerciantes del primer cuadro.

Quintero Martínez explicó que se trata de una propuesta integral con estas dos acciones que deberán estar concluidas antes de que finalice el año: transporte colectivo y transporte de carga. En el primer caso, aseguró que no ha encontrado resistencia, pero falta construir los acuerdos, “confío –apuntó el funcionario– en que será un acuerdo y no una imposición”.

Consideró que antes de esto tendrá resuelto el tema del transporte de carga, a partir de los resolutivos a que se llegue en el foro se realizará con las cámaras de Comercio de la Ciudad de México y de Autotransporte de Carga el próximo 14 de noviembre en el Palacio de Minería.

Refirió que en este caso se trata de varios miles de unidades que todo el día y por todas las calles cargan y descargan indiscriminadamente toda clase de mercancías provocando un caos en la zona y que es necesario reordenar para una recuperación integral de la zona.

En el punto de partida del recorrido, en el cruce con Venustiano Carranza, Moreno Toscano recordó que el reloj donado por la comunidad otomana a la ciudad, en esa esquina cumplirá también 100 años en septiembre de 2010, en tanto que la fuente a un lado, funcionaba más bien como vertedero para los aguadores que cargaban el líquido en sus mulas por lo que “esto se volvía literalmente un muladar”.

Y antes de que la cantina en esa esquina llevara el nombre de El Gallo de Oro, fue la primera de la República que tuvo autorización para venta al mayoreo y menudeo de licores, como no está permitido ahora, otorgada por el presidente Guadalupe Victoria, y muy cerca, en lo que hoy es el Club de Banqueros, existió el Colegio de Niñas, que originalmente dio el “pomposo” nombre a la vialidad de Calle de las Doncellas.

“Lo que quiero comentarles es que la ciudad cambia, el espacio público permanece, pero lo vive cada generación a su manera y el gobierno de la ciudad ha decidido crear un espacio para el mundo contemporáneo que se va a legar para las generaciones siguientes”.