Denuncian votaciones ilegales en varios centros de trabajo
Acusan a Hernández Juárez de querer imponer su reforma
A poco más de una semana de que comenzaron las votaciones sobre la reforma estatutaria en el Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana (STRM), integrantes de la Red Nacional Telefonista (RNT) denunciaron que, en pleno proceso, Francisco Hernández Juárez, secretario general del gremio, visita los centros de trabajo para realizar proselitismo en favor de su propuesta, la cual, asegura, ya cuenta con el apoyo de más de 9 mil sufragios de los 11 mil emitidos.
Lo anterior fue rechazado por la RNT, la que negó que las modificaciones a los estatutos estén siendo bien recibidas, puesto que plantean, entre otros aspectos, la relección del secretario general, el aumento de las cuotas sindicales de los jubilados, la creación de la figura de un secretario adjunto y deja en el limbo la eventual participación de los dirigentes en cargos de elección popular.
Cabe destacar que Hernández Juárez aseguró hace casi un mes que tenía intenciones de postularse para una diputación.
Alicia Sepúlveda, integrante de la Red Nacional, consideró que no es verdad que la reforma cuente con 9 mil votos en favor, “porque resulta que aún no votan las secciones más grandes, es decir, Monterrey, Guadalajara y Puebla, y tampoco lo han hecho otras pequeñas, como Toluca y Querétaro, así como muchos de los centros operativos y las operadoras de 050 y 090”.
Por su parte, Miguel Angel Lara Sánchez, también de la red, sostuvo que la dirigencia del STRM utiliza “tácticas diferenciadas con una multitud de mañas, triquiñuelas y artificios para sacar la votación a favor, pasando por encima de la legalidad estatutaria”. Narró que, por ejemplo, en algunos centros de trabajo “los comisionados nacionales y los miembros del comité ejecutivo nacional llaman a los compañeros en pequeños grupos al local sindical para hacerlos votar”, y que otra de las formas es “hacer reuniones en centros pequeños en donde se hace una pantomima de asamblea, y sin discusión suficiente de por medio los hacen votar”.
Sobre esto, Sepúlveda agregó que también “se está votando sin padrón, por lo que se puede sufragar varias veces o pueden hacerlo por los ausentes, incapacitados o los que se abstuvieron, pues cualquiera puede llenar la boleta con los datos de otro trabajador si conoce su nombre y expediente, los cuales pueden obtenerse del escalafón o hasta de su tarjeta de checar y no se publican las actas de escrutinio inmediatamente después de realizado éste. En consecuencia, se puede meter cachirul y sustituir actas”.
Lara Sánchez apuntó que, aunado a lo anterior, la dirigencia imprimió una circular en donde “se habla en general de la reforma y se ensalzan sus bondades, pero no así los artículos que son lesivos al sindicato, y no se está dando tiempo para leer todas las propuestas de reforma, que llevarían aproximadamente una lectura de una a dos horas”. En suma, señaló, sólo se dan a conocer los aspectos menos dañinos, pero se esconden los que generan rechazo.