Usted está aquí: martes 30 de octubre de 2007 Política Crece la explotación sexual y laboral de migrantes en EU

Habría hasta 18 mil, dicen autoridades de Los Ángeles

Crece la explotación sexual y laboral de migrantes en EU

Víctor Ballinas (Enviado)

Ampliar la imagen Manifestación en pro de inmigrantes en Irving, Texas, a mediados de mes Manifestación en pro de inmigrantes en Irving, Texas, a mediados de mes Foto: Reuters

Los Ángeles, Cal., 29 de octubre. En las industrias de la construcción, textil, restaurantera, en campos agrícolas, bares y salas de masaje, miles de personas son explotadas “laboral y sexualmente” en Estados Unidos, denuncian autoridades laborales, policiacas y de salud de esta ciudad.

Brian Taverner, director de distrito del Departamento del Trabajo de Los Ángeles; Carolina Wittcot, fiscal de la ciudad, y Carlos Valdez, del departamento de la policía angelina contra la trata de personas, manifestaron preocupación, porque el problema de trata de personas crece en el país: “llegan cientos desde Japón, China, Corea, Vietnam, Europa del este, México, Centroamérica y de otros lugares”.

Al reunirse con las organizaciones civiles mexicanas Sin Fronteras, Centro Fray Julián Garcés, la Red Nacional de Refugios para Personas Víctimas de Trata, y del Centro de Estudios e Investigación en Desarrollo y Asistencia (Ceidas), así como personal de la Procuraduría General de la República (PGR) –invitados por Washington para conocer el trabajo contra la trata de personas–, los funcionarios referidos destacaron que no se cuenta con estadísticas precisas sobre el problema, aunque se estima que la cifra mundial de personas explotadas laboral y sexualmente va de 500 mil a 2 millones, mientras en Estados Unidos, “conservadoramente”, serían entre 15 mil y 18 mil.

Taverner detalló que “se dan muchos fraudes con las visas para los trabajadores, se las cobran hasta en 20 mil dólares por los documentos que son gratuitos, se aprovechan los tratantes de que quienes quieren venir a trabajar a Estados Unidos no saben que no se les cobra por esas visas, y una vez enganchados, les quitan sus documentos de trabajo para obligarlos a pagar la deuda, así, los hacen esclavos”.

Explicó que muchos de esos trabajadores ingresan de manera legal y “otros son trasladados con documentos falsos, vienen niños, niñas, adolescentes hombres y mujeres. Estos trabajadores son forzados a trabajar en el industria del sexo, en bares, salones de masajes o incluso son sirvientes y en las casas los empleadores abusan de ellos, pues los compran”.

Taverner dijo a los representantes mexicanos, así como a un grupo de periodistas de este país: “tenemos problemas con la entrada de chinos al país, y también con mexicanos, coreanos y de otros países asiáticos”.

La fiscal Wittcot señaló que la trata de personas tiene relación con el lavado de dinero. Se estima que en el mundo “se obtienen 3 mil 500 millones de dólares anuales por esa actividad”.

Este problema no sólo implica la violación de derechos humanos, atenta contra la dignidad de las personas y su libertad. “Una vez que los migrantes han llegado a este u otro país, los traficantes no les cumplen las promesas de empleo. A las mujeres les ofrecen trabajos en la industria, en salones de bellaza, en servicio doméstico, y cuando llegan son obligadas a prostituirse, son redes del crimen organizado las que operan esta suerte de esclavitud moderna.”

Las autoridades expusieron que “para combatir la explotación laboral y sexual de hombres, mujeres y niños, se requiere que el gobierno destine mayores recursos económicos y humanos, porque las investigaciones son tardadas, y hay que destinarle varios agentes a darle seguimiento a un solo caso”.

Durante las explicaciones, los funcionarios de Los Ángeles indicaron que “no está claro en la Ley Federal contra la Trata de Personas cuándo el delito es federal y cuándo es estatal; lo que vemos es que los agentes federales atraen el caso, y si implica muchas personas explotadas o se ve de fácil investigación, lo atraen, y si no lo dejan a la policía estatal, eso es algo en lo que aún se debe avanzar para precisarlo claramente en las leyes federal y estatales”.

 
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