DIRECTORA GENERAL: CARMEN LIRA SAADE
DIRECTOR FUNDADOR: CARLOS PAYAN VELVER
SUPLEMENTO MENSUAL  DIRECTOR: IVAN RESTREPO  
EDICIÓN: LAURA ANGULO   LUNES 29 DE OCTUBRE 2007 
NUMERO ESPECIAL


Portada

Presentación

Los ecosistemas vegetales marinos del Golfo de California
Rafael Riosmena Rodríguez, Litzia Paul Chávez, Gustavo Hernández Carmona, José Luis León de la Luz y Reymundo Domínguez Cadena

Mantos de rodolitos
Rafael Riosmena Rodríguez y Gustavo Hinojosa-Arango

Bosques de Sargassum
Litzia Paul Chávez, Rafael Riosmena Rodríguez y Gustavo Hernández Carmona

Los manglares en la península de Baja California
Reymundo Domínguez Cadena, José Luis León de la Luz y Rafael Riosmena Rodríguez

Praderas de fanerógamas
Rafael Riosmena Rodríguez y Paola Rodríguez Salinas


Correo electrónico:

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Bosques de Sargassum

Litzia Paul Chávez
Rafael Riosmena Rodríguez
Gustavo Hernández Carmona

Las macroalgas son recursos que se han explotado desde principios del siglo XX por parte de la industria alimenticia para la obtención de espesantes y gelificantes, como los alginatos. A partir de la Segunda Guerra Mundial y con la exploración de mantos de algas rojas, productoras de otro espesante (carragenina), se ha incrementado el interés por encontrar alternativas para ampliar los mercados de los ficocoloides.

Sin embargo, la gran mayoría de algas que se explotan están en las zonas templadas. En los últimos 30 años se han explorando bancos algales en zonas tropicales, principalmente en el Pacífico central y oriental (Filipinas, Tailandia, Malasia, Indonesia, Myanmar, Bangladesh, India, Vietnam).

Entre los principales géneros de macroalgas considerados como potenciales para su explotación se encuentra Sargassum. Este género es el más abundante y dominante en las zonas tropicales, rocosas someras donde forma pequeños bosques de gran interés ecológico y económico.

Las especies del género Sargassum se les conoce como alginofitas, ya que contienen alginatos, que se emplean como espesantes y gelificantes en diversas industrias, principalmente la de alimentos. Pero también se emplean para consumo directo y medicinal. Estos bosques de algas mantienen importantes pesquerías, al igual que ocurre con otras especies de algas cafés conocidas como kelps (como Macrocystis y Eisenia), en regiones subtropicales y templadas.

Aunque se reconoce que Sargassum forma mantos extensos en casi todas las áreas tropicales del mundo, su utilización no se ha podido desarrollar por varios motivos.

El primero es la identificación taxonómica de las especies y la variabilidad intra e interpoblacional, ya que en varias partes del mundo no se tiene claro cuáles y cuántas especies de Sargassum existen. Esto se debe a las dificultades para definir las características morfológicas (caracteres) de cada una de las especies. Muchos de estos problemas son el resultado de la gran variabilidad morfológica de las plantas (talos).

Esta variabilidad ha sido estudiada en trabajos de taxonomía para llegar a caracteres confiables y estables; o en trabajos posteriores para determinar las características de los ejemplares típicos (morfotipos) en las especies que sí están claramente determinadas.

El segundo problema está vinculado con dinámica poblacional, puesto que es necesario conocer cuándo se recluta y su temporada de reproducción, entre otros parámetros poblacionales, para así determinar técnicas y temporadas de cosecha, con lo que se puede lograr un manejo adecuado del recurso.

El tercero es la interacción entre especies y los factores ecológicos que regulan la presencia y abundancia de los mantos. Finalmente, la cuarta es la calidad de alginato que contienen y su variabilidad entre especies.

En Filipinas se ha logrado un manejo adecuado de las pesquerías de Sargassum, que está sostenida por ocho especies claramente identificadas. Antes de empezar la explotación, calcularon la distribución de los mantos, la biomasa disponible y la relación de la variabilidad de ésta con las variables ambientales.

Una vez que se tenía esta información sobre los mantos, se desarrollaron trabajos para desarrollar su utilización. Determinaron la calidad del alginato y su relación con la biomasa en cuatro especies que se consideran importantes en la industria del alginato. Además se calculó la biomasa con fines de cosecha y la calidad del alginato por estadio de crecimiento, encontrando que no hay diferencia por estadio, pero sí por especie.

Hasta el momento, sólo en el Pacífico oriental se han abordado los problemas taxonómicos y de variabilidad intraespecífica delimitando especies con sus respectivos morfotipos.

Sobre dinámica poblacional , en especies en las que se llevan a cabo cosechas con fines comerciales, se ha estudiado el reclutamiento y la obtención de biomasa con tres tipos de cosecha.

Las especies de Sargassum del Golfo de California presentan dos temporadas a lo largo del año. Una caracterizada por presentar un máximo de biomasa y la otra con una biomasa mínima o nula.

Además de esta conclusión, se ha encontrado una diferencia entre las especies templadas y tropicales, señalando que para las especies tropicales la temporada de máxima biomasa se presenta en primavera-verano y la de mínima en otoño-invierno y en las templadas el patrón se invierte.

No se ha esclarecido cuál o cuáles son los factores que regulan a las poblaciones. En Filipinas se han descrito los cambios estacionales en el crecimiento y la reproducción de la especie, encontrando que hay una relación directa entre la temporada de bajas temperaturas y el periodo de reproducción.

La temporalidad de las especies del género Sargassum está determinada por el rompimiento o fragmentación de las frondas de la planta. Esta fragmentación parece tener una relación con la reproducción, ya que se presenta una gran cantidad de estructuras reproductoras (receptáculos). Esto se ha corroborado al contrastar nuestros resultados con los valores del punto de compensación (entre plantas perdidas y en crecimiento) previamente evaluado en el sitio.

Hay trabajos que consideran que la temperatura es el factor que afecta el punto de compensación más que la calidad e intensidad de luz.

En S argassum filipendula se ha medido la concentración de proteínas y carbono en los metabolitos secundarios y la susceptibilidad al herbivorismo, encontrando una relación inversa. Mientras que para las especies de Sargassum que crecen en el arrecife de la gran barrera de Australia, se observa que las aguas donde vive le aportan cantidades por debajo de las necesarias de los elementos esenciales (nitrógeno y potasio), por lo que toman estos nutrientes de la materia orgánica particulada que ahí se genera. La importancia de la proporción que reciben de nitrógeno y potasio también fue encontrada en arrecifes de Hawai.

En el Golfo de California el esfuerzo de investigación se ha dirigido a determinar la biomasa total. Se han localizado 18 mantos que se distribuyen de manera casi continua a lo largo de la costa, pero presentan variaciones importantes en su abundancia a lo largo de los años.

En la región central del Golfo de California (costa oeste de Bahía Concepción) se han detectado también más de 10 mantos importantes en los cuales se determinó la variación estacional de la biomasa y la talla de las especies.

Como complemento a los estudios de evaluación, se estudió el crecimiento de Sargassum horridum en la Bahía de La Paz. Las mayores tasas de crecimiento se presentaron en el periodo febrero-marzo, asociados a las bajas temperaturas (21 ºC).

La falta de conocimiento integral sobre de las especies que conforman los mantos de Sargassum en el suroeste del Golfo de California impiden que se convierta en un recurso potencial, ya sea para emplearlas como suplemento alimenticio para animales, incluido el hombre, aunque tenga una biomasa alta. Tampoco se cuenta con la información necesaria para proponer un manejo apropiado de los mantos, por lo que las próximas investigaciones deberán estar dirigidas hacia ese objetivo.

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