En únicamente tres años el valor neto de los bienes de Centmex se incrementó 58%
Adquirió empresa de Carlos Slim otros ocho inmuebles en el Centro Histórico
Se encuentran en el perímetro A, de donde fueron retirados miles de ambulantes
En los últimos tres años, la compañía Centro Histórico de la Ciudad de México (Centmex) obtuvo un incremento de 58 por ciento en el valor neto de sus inmuebles, al pasar de 481 a 762 millones de pesos entre 2003 y 2006, a pesar de que sólo adquirió ocho más en dicho periodo.
La mayoría de los 56 inmuebles que actualmente tiene esa empresa –“controlada indirectamente por la familia Slim”, según el reporte anual que presentó a sus inversionistas y a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV)– se ubican en la parte poniente del llamado perímetro A del Centro Histórico, cuyas calles quedaron limpias de vendedores ambulantes desde el pasado 12 de octubre, por disposición del Gobierno del Distrito Federal.
Creada a mediados de julio de 2001 como sociedad de capital variable, destinada a la compra, venta y arrendamiento de bienes inmuebles, principalmente de aquellos ubicados en el Centro Histórico del Distrito Federal, en 2003 la firma tenía 48 en la zona, con un valor de 481 millones de pesos y 29 mil metros cuadrados en conjunto.
Tres años después, las propiedades de Centmex se elevaron a 56, a finales del año pasado, con un valor neto de 762 millones 846 mil pesos y 33 mil 804 metros cuadrados, es decir, con ocho más obtuvo 4.8 mil metros cuadrados más, pero incrementó 58 por ciento el valor total.
A la fecha, la empresa se ha convertido en dueña de los hoteles Virreyes, Bamer y Señorial, así como de una escuela que se ubica en Vizcaínas número 8, entre Eje Central y Aldaco, pero sus principales propiedades son 17 edificios habitacionales, 28 de uso comercial y ocho estacionamientos.
Centmex –siglas con las que opera en la BMV, aunque también registró las palabras “Centro Histórico” como marca ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial– pretende fomentar giros que reactiven la actividad económica en la zona; “por ejemplo, supermercados, cines y clubes deportivos”, aunque asegura que también buscará promover el uso de inmuebles para fines de entretenimiento, como cines, discotecas y teatros.
Las compras y enajenaciones de edificios por Centmex no han cesado, ya que “tiene planeado adquirir nuevos inmuebles en zonas determinadas del Centro Histórico, con el fin de mejorar el nivel de vida social y comercial de las mismas. La estrategia consiste en atraer más comercios y aumentar la población con mayor poder adquisitivo. En especial concentra sus esfuerzos en las calles de Uruguay, Venustiano Carranza, 16 de Septiembre, Madero, 5 de Mayo, Tacuba y Donceles, es decir, desde el Eje Central hasta 5 de Febrero”, establece en su último informe financiero anual.
Con rentas que fluctúan entre 2 mil y hasta 70 mil pesos, “dependiendo los metros cuadrados arrendados, así como la ubicación y los giros de los mismos”, la compañía ha establecido contratos de renta de sus propiedades con diversos clientes, entre ellos el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura.
En el informe a sus inversionistas, la empresa destaca las ventajas que tiene en la zona, pues los únicos competidores que enfrenta son el gobierno local y la Iglesia católica, ya que poseen 30 por ciento de inmuebles del Centro, pero de igual manera pondera las deducciones y estímulos fiscales, así como subsidios tanto locales o federales que obtiene por la compra de edificios en el primer cuadro de la ciudad.
No obstante, Centmex también advierte que la inseguridad pública, los conflictos sociales, los bloqueos, las marchas y, en general, las protestas, así como la invasión de inmuebles por parte de grupos sociales, pueden afectar a la compañía, lo mismo que otros riesgos de índole inmobiliaria o vinculados con desastres naturales, porque, recuerda, “los activos de la compañía se encuentran en una zona de alta sismicidad”.