Fueron detenidos 42 toreros durante el segundo día de cumplimiento del bando en el CH

Sin ambulantes, los establecidos sacaron su mercancía a la calle

Comerciantes ocuparon las aceras para exhibir maniquíes; varios productos fueron asegurados

Alejandra Barrios, en favor de la reubicación, “pero existe el riesgo de regresar”, advierte

Agustín Salgado, Alejandro Cruz y Ángel Bolaños

La Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal (SSP-DF) informó que fueron detenidos 42 vendedores ambulantes, conocidos como toreros, por incumplir el bando emitido en 1993 que prohíbe el comercio en vía pública en el perímetro A del Centro Histórico.

En un reporte de la corporación policíaca se explica que las personas aprehendidas, en su mayoría hombres, fueron presentados ante los juzgados cívicos 4 y 5 donde se les impondrá una sanción administrativa.

Las detenciones se realizaron sin contratiempos y ocurrieron en la calle de Moneda, donde se registró el mayor número: en Alhóndiga se aseguró la mercancía de siete vendedores ambulantes; en la zona comprendida por las calles Academia, Argentina y Doblado fueron 17 los detenidos y en Moneda y sus continuaciones, como Emiliano Zapata, se aseguraron a 17 más.

El secretario de Gobierno capitalino, José Angel Avila Pérez, aseguró que se trata de un grupo de vendedores ambulantes independientes que no pertenecen a ninguna de las organizaciones con la que se establecieron acuerdos.

El perímetro A, que comprende 87 calles y 192 manzanas, permanece vigilado por mil 200 policías adscritos a las Unidades de Protección Ciudadana (UPC) Mixcalco, Corredor y Centro, con apoyo del Sector Heraldo y personal de la Dirección de Programas de la delegación Cuauhtémoc.

Minutos antes del mediodía se comenzaron a recibir en el centro de mando de la policía los primeros informes de la presencia de toreros, sobre todo en la parte oriente y sur del primer cuadro de la ciudad, por lo que la corporación reforzará los rondines de vigilancia en calles como Correo Mayor, Moneda, Pino Suárez, 20 de Noviembre, Regina y Apartado.

A esa hora, más de 50 toreros se ubicaron en calles como Jesús María y Correo Mayor. Encabezados por un sujeto al que llamaban El Gordo, los comerciantes ofrecieron a gritos su mercancía a los transeúntes, mientras que un grupo de jóvenes se mantenía a la expectativa, inclusive sobre una escalera, de los patrullajes de la policía o el personal de la delegación Cuauhtémoc.

En un ambiente tenso, cada 15 minutos en promedio, los vendedores tenían que levantar sus productos, los cuales colocaron sobre hules, al escuchar los silbidos que los alertaban de la presencia de elementos de Protección Ciudadana o de los inspectores delegacionales; en algunos casos, los policías de la UPC pasaban de largo ante los toreros instalados en las aceras.

“Tenemos que sacar para comer, no tenemos otra opción”, dijo El Gordo, quien señaló que a su organización, la cual aseguró es independiente, hasta el momento las autoridades capitalinas no le han informado sobre dónde la reubicarán. Alrededor de las 17:00 horas la presencia de toreros se redujo de manera considerable.

En su mayoría, el perímetro A del Centro Histórico permanece sin vendedores ambulantes: Correo Mayor, Moneda, Jesús María, entre otras vías, ahora fueron tomadas por los transeúntes; en Corregidora colocaron carteles en papel fluorescente con escritos como “Hoy voy a comer papas” o “Gracias a Marcelo una niña minusválida no podrá comprar sus medicinas”, pero también comerciantes establecidos aprovecharon para colocar su mercancía en las aceras, lo que dificultaba el paso de las cientos de personas que caminaban por ahí. Las calles lucieron sucias y con decenas de automóviles estacionados.

El operativo policiaco y delegacional continúa, los patrullajes son constantes, sin que se reporten incidentes mayores más allá de las detenciones. A su paso, los funcionarios de la Dirección de Programas Delegacionales de Cuauhtémoc aseguraron la mercancía que los comercios establecidos colocaron en las banquetas, sobre todo ropa y maniquíes, así como los productos de los toreros que lograron sorprender infragantes.

Continúa entrega de plazas

Mientras, ayer continuó la entrega de plazas a los comerciantes ambulantes, esta vez tocó el turno a los agremiados de Alejandra Barrios, quienes empiezan ocupar edificios expropiados por el gobierno capitalino en las calles de Palma, Apartado y Argentina.

De acuerdo con la lideresa, en esos inmuebles apenas se podrán ubicar a unas dos mil de las más de tres mil 500 personas que conforman su organización, por lo que pedirá al gobierno del DF la asignación de más lugares.

Reconoció que existe el riesgo de que los líderes sean rebasados si las plazas no funcionan, por lo que, dijo, es necesario que el gobierno implemente campañas de publicidad en los medios de comunicación, para que “la gente sepa dónde estamos y qué estamos vendiendo”.

En entrevista, Barrios dijo que está de acuerdo con la reubicación y que se buscará por todos los medios que los integrantes de su organización no regresen a la calle, aunque reconoció que existe el riesgo de que eso suceda, si las plazas no funcionan, porque “la gente tiene que buscar para comer”.

A su vez, Ávila Pérez informó que en breve iniciará un proceso de individualización de los predios asignados a las organizaciones con el propósito de evitar la intención de los líderes de las organizaciones de vender o rentar los espacios.

Por lo que hace a los trabajos que inició la Secretaría de Obras en las calles liberadas, dijo que primero se hará una limpieza profunda para enseguida hacer la valoración de las reparaciones que se requieren en banquetas, guarniciones y el arroyo vehícular, así como para la restitución de postes para la iluminación de la zona.