Por ahora están fuera propuestas del PRD, como la eliminación del fuero militar

Proponen dar reconocimiento explícito a derechos humanos en la Constitución

Reconoce Creel que la iniciativa puede ser enriquecida; el Senado, su próxima escala

Andrea Becerril

Dentro de los trabajos para la reforma del Estado, el presidente del Senado, Santiago Creel Miranda, dio a conocer ayer la iniciativa para modificar la Constitución, a fin de llevar a la Carta Magna el reconocimiento explícito de los derechos humanos y la ampliación de los mismos, con la protección directa de las garantías establecidas en más de 300 tratados internacionales en la materia, signados por el gobierno mexicano.

La reforma a diversos artículos constitucionales “dará lugar a una verdadera transformación de nuestro sistema jurídico, porque será origen de un nuevo enfoque sobre la persona y sus derechos básicos”, comentó Creel durante la sexta reunión de la Comisión Ejecutiva de Negociaciones y Construcción de Acuerdos del Congreso de la Unión (Cenca).

La próxima semana se presentará ante el pleno del Senado esa iniciativa, que costó trabajo sacar, ya que la negociación se complicó, porque el Partido de la Revolución Democrática (PRD) insistía en que se incluyeran otros temas de derechos humanos, entre ellos eliminar el fuero militar, el establecimiento en el artículo 33 constitucional del derecho de audiencia a extranjeros que se pretende expulsar del país y la supremacía de los tratados internacionales sobre las leyes internas.

Al final los perredistas aceptaron firmar la iniciativa en sus términos, pero durante el encuentro el coordinador de los diputados del PRD, Javier González Garza, informó que, aunque evidentemente la propuesta tendrá consenso, ellos llevarán a la discusión otros temas, que esperan sean también atendidos.

Incluso presentó ante la Cenca un documento en el que, explicó, dejaría constancia “de lo que nosotros consideramos la agenda mínima de derechos humanos”, y un cuadro comparativo de la iniciativa que difundió Creel, que se elaboró a partir de las propuestas surgidas durante el foro público sobre garantías sociales –dentro de la reforma del Estado– y los planteamientos específicos de las fuerzas políticas.

Propuesta inacabada

En su discurso, Creel reconoció que la propuesta no está acabada y que todos los planteamientos se tomarán en cuenta durante los trabajos para dictaminar esa reforma, que modifica varios artículos constitucionales, entre ellos, el primero, el tercero y el 133, con la finalidad de reconocer e incorporar a la Carta Magna la protección directa de los derechos humanos asentados en los tratados internacionales.

La exposición de motivos precisa que se pretende además homologar la protección y defensa de los derechos humanos en todo el territorio nacional –se dota de mayores facultades a las comisiones estatales– se incluye como prioridad su respeto en los órganos policiacos y de seguridad pública y su promoción como uno de los principios fundamentales de la educación en México.

A pesar del reconocimiento a las garantías sociales logrado en la Constitución de 1917, en el texto no hay un reconocimiento explícito a los derechos humanos como fundamento último de las instituciones de la República. En el artículo primero se habla de garantías sociales otorgadas por el Estado, lo que dista mucho de concordar con el reconocimiento universal de los derechos humanos.

Agrega que “los derechos humanos establecidos en los tratados internacionales, no obstante que se integran en el orden jurídico mexicano, conforme al artículo 133 constitucional, carecen de una verdadera efectividad en su aplicación”.

De ahí que con la reforma se pretende “ampliar la protección de los derechos humanos establecidos en los tratados internacionales –que son más de 300– sin dejar de amparar los que bajo el concepto de garantías individuales que incluye nuestra Constitución”, se agrega en la exposición de motivos.

Por tanto, “no se trata de un reconocimiento meramente teórico, sino real y vinculativo”. Se propone modificar el capítulo I del título primero de la Constitución, que actualmente se denomina “De las garantías individuales” y en adelante será “De los derechos humanos”.