De acuerdo con informe de la SEP, carecen de electricidad unos 52 mil inmuebles
Sin drenaje, más de 60% de escuelas
Más de 100 mil escuelas, a las que asisten 8 millones 300 mil niños y jóvenes, carecen de drenaje, y cerca de 5 millones de estudiantes acuden a establecimientos con fosas sépticas; de teléfono y de fax, ni hablar en esos colegios, 51 mil 686 de los cuales no tienen energía eléctrica.
El estado de los inmuebles destinados a la enseñanza se exhibe en un estudio de la Secretaría de Educación Pública (SEP), el cual revela que de 165 mil 540 planteles, 141 mil 912 (85.7 por ciento) están en condiciones físicas “malas” o “regulares”, pese a que atienden a más de 21 millones de alumnos.
A 147 mil 463 escuelas (89.1 por ciento) les faltan laboratorios, y 152 mil 616 (92.2 por ciento) carecen de talleres. Asimismo, 110 mil 387 (66.6 por ciento) son edificios con más de 11 años de antigüedad.
El informe de la SEP Resultados del diagnóstico de inmuebles escolares: cifras preliminares deja de manifiesto el estado deplorable en que se encuentran las edificaciones, desde las destinadas a primarias hasta las de nivel superior.
De las más de 165 mil escuelas, 143 mil 374 son de uso público y 22 mil 166 de uso privado. En conjunto tienen una matrícula de 24 millones 224 mil 845 alumnos, aunque hubo cinco entidades que al corte del estudio no habían enviado información.
La problemática se inicia desde las vías de acceso a las escuelas, pues 100 mil 643 (60 por ciento) no tienen camino pavimentado, lo cual dificulta el acceso a 10 millones 32 mil 283 alumnos.
Hay otros 50 mil 736 planteles (30 por ciento) a los que más de 3 millones de estudiantes sólo llegan por terracería, y más de 800 mil por brechas y veredas.
De acuerdo con el informe, unos 500 mil educandos asisten a 8 mil 561 inmuebles que no tienen agua, y 6 millones 522 mil 754 a 39 mil 327 escuelas a las que sólo se surte por medio de pozos, manantiales, aljibes y pipas. Es decir, casi 30 por ciento de los establecimientos tienen problemas con el servicio.
Asimismo, 130 mil 117 escuelas (78.6 por ciento) no cuentan con teléfono, y 151 mil 263 (91.3 por ciento) carecen de fax.
En casi 53 mil inmuebles distribuidos en 36 mil 600 localidades hay fosa séptica en lugar de drenaje, y 4 millones 557 mil 252 de niños y jóvenes acuden a edificios sin energía eléctrica.
Pero los anteriores son sólo algunos de los innumerables déficit en la infraestructura escolar, porque 21 mil 473 centros, donde se imparte enseñanza a cerca de 1.5 millones de alumnos, no fueron construidos para dicho fin; de ese total, 60.4 por ciento son viviendas; 5 por ciento, locales comerciales; 2.5, anexos de oficinas públicas; 2.7 por ciento, edificios de departamentos, y 1.2, casas de cultura.
Además, 19.4 por ciento de las 165 mil 540 escuelas tienen antigüedad de 31 o más años, 23.1 de 21 a 30 años, 24.1 de 11 a 20 años y sólo 25.5 de uno a 10 años. Es decir, apenas 42 mil planteles, con cerca de 3 millones 300 mil estudiantes, cuentan con instalaciones relativamente nuevas.
Alrededor de 17.5 millones de alumnos acuden a instalaciones sin laboratorios, y la carencia de talleres afecta a más de 18 millones; 115 mil 669 escuelas (70 por ciento) no tienen anexos académicos, y de las que cuentan con ellos sólo 851 (0.5 por ciento) están en buen estado.
En cuestiones deportivas la situación no es mejor, pues 112 mil 344 (67.9 por ciento) carecen de instalaciones para hacer ejercicio, y sólo 16 planteles tienen un anexo deportivo en “buen estado”. Por si fuera poco, a más de la mitad de las escuelas les faltan espacios administrativos.
Debido a esos rezagos, 81 mil 932 planteles (49.5 por ciento) se encuentran en un estado que se califica de “malo”, 59 mil 980 (36.2 por ciento) de “regular” y sólo mil 176 (0.7 por ciento), donde toman clases medio millón de alumnos, se consideran en “buena” condición.