En 13 años del Operativo Guardián han muerto 4 mil 500 migrantes, señalan ONG

Desconocida aún, cifra de decesos en la frontera pese a repatriaciones desde EU

José Antonio Román

Aunque las secretarías de Gobernación y de Relaciones Exteriores resaltan el recién concluido programa de repatriaciones a México desde Tucson, Arizona, todavía no se liberan las cifras oficiales de migrantes muertos este verano pese a esta medida, según señalaron diversas organizaciones pro migrantes. Hasta el 30 de agosto pasado, la cifra de decesos durante 2007 ascendía a 294, extraoficialmente.

Las organizaciones California Rural Legal Assistance, de San Diego, y Coalición Pro Defensa del Migrante AC, de Tijuana, recordaron también que el pasado 1º de octubre se cumplieron 13 años de que el gobierno de Estados Unidos puso en marcha el Operativo Guardián en la frontera, tiempo durante el cual han muerto 4 mil 500 migrantes.

Este operativo, explicó Claudia Smith, directora de la organización californiana, se puso en marcha para bloquear el paso de indocumentados en la frontera, mediante la construcción de bardas y colocación de cámaras de vigilancia, y la contratación de cada vez más elementos de la Patrulla Fronteriza, recientemente apoyados por personal de la Guardia Nacional.

Ambas organizaciones estimaron que conforme avanza la construcción del muro fronterizo, las indicaciones son que este año podría convertirse en el peor en lo que respecta a las muertes durante el cruce. Con 516 decesos de migrantes, 2005 es hasta ahora el año con el número más alto de muertos.

Smith señaló que el resultado de la estrategia fue el desvío de los flujos a los lugares más apartados y peligrosos, y la prueba de lo mortífero fue que la estadística de muertos se disparó a partir de entonces. En 1995, ya con el Operativo Guardián, se produjeron 61 muertes; y al siguiente 87, y a partir de entonces la estadística no paró, pues en 1997 se contabilizaron 149, y en 1998, 329 fallecimientos. En 2000 la cifra llegó a 499 decesos oficialmente.

Los años siguientes hubo 387 (2001), 371 (2002), 417 (2003), 373 (2004), 516 (2005) y 485 (2006).

Las secretarías tampoco han dado respuesta a reiteradas solicitudes para que el gobierno mexicano busque costear el pasaje vía terrestre de todo aspirante a indocumentado en cualquier parte de la frontera norte que opte por retornar voluntariamente hasta su población de origen, medida que podría dar mejores resultados que el programa de repatriación, en cuanto a salvar vidas.

Las ONG dijeron que es “urgente” incorporar más elementos del llamado Grupo Beta para orientar a los migrantes en relación con los peligros a que se exponen, así como rescatarlos y darles primeros auxilios. Resulta lamentable observar que en algunos municipios fronterizos, ante la falta de compromisos de autoridades locales, esta corporación apenas supere la docena de elementos y unos cuantos vehículos para trasladarse.

El Operativo Guardián, que fue la estrategia estadunidense para desviar el tránsito indocumentado a los lugares más apartados y peligrosos, se puso en marcha en San Diego el 1º de octubre de 1994 con la meta de cerrar el paso a los migrantes que intentaban el cruce en inmediaciones de Tijuana, ruta relativamente segura. Fue modelo para el resto de la frontera.

El resultado es que el flujo migratorio no se redujo y el número de cruces se incrementó de manera exponencial, y creció la cifra de muertes de quienes han tenido que intentar el cruce en lugares cada vez más apartados y de difícil acceso, como el corredor del desierto de Sonora-Arizona, donde se registra el mayor porcentaje de muertes de migrantes.

“Entre la falta de oportunidades de todo tipo en México y el recrudecimiento de las políticas antinmigrantes en Estados Unidos, el panorama se presenta desolador”, afirmaron las organizaciones en un comunicado conjunto.