Bajo la Lupa
Transparencia Internacional: ¿“seudópodo de la CIA”?
Ampliar la imagen George Soros en imagen de archivo Foto: José Núñez
Cuando detectamos que la quebrada Enron, la mafiosa gasera texana vinculada al nepotismo dinástico bushiano, financiaba a Transparencia Internacional (TI), sospechamos que algo más hediondo rezumaba en Dinamarca, para parafrasear al inmortal bardo.
La asociación internacional Réseau Voltaire (29/9/07) se lanza a la yugular de la muy opaca Transparencia Internacional (TI) y expone sus “delitos flagrantes”, en referencia a su reporte sobre “corrupción en el mundo”.
Más allá de sus inverosímiles hallazgos con dedicatoria sesgada y su hilarante cuan rústica metodología de “encuestas” –muchas por “teléfono”, es decir, que escapan al rigor del escrutinio y pueden ser inventadas–, existen multimedia muy laxos a quienes convienen sus resultados que difunden sin continencia, sin el menor juicio crítico, y sin conocer la identidad de los autores, ya no se diga la finalidad aviesa que resguardan.
Sus índices de “percepción (¡súper sic!) de la corrupción”, verdadero atentado desinformativo contra la opinión pública, dejan mucho que desear, así como sus otros “índices” muy rupestres, ya que su (ab)uso es problemático para calcular las “series de tiempo” estadísticas.
“¿Qué se oculta detrás de la opaca TI?”, pregunta Réseau Voltaire, que la cataloga como “seudópodo (¡súper sic!) de National Endowment for Democracy (NED), la agencia de intervención legal de los gobiernos de EU y Gran Bretaña”, lo cual “no tiene nada de asombroso, pues sus principales dirigentes están ligados a la CIA (¡súper sic!) de EU y al MI6 británico”. ¡Santo Dios!
¿Es entonces, el presidente de su filial “mexicana”, Federico Reyes Heroles González-Garza,“empleado” subrepticio de la CIA y el MI6? Esto sería sumamente grave porque su hermano Jesús, no el nazareno, sino el director de Pemex, detenta la llave de lo que queda de riqueza nacional? ¿No sabrá para quién (co) labora Federico, muy dado en pontificar, más a siniestra que a diestra, a los “mediocres”, es decir, a quienes no se someten a la privatización de Pemex y la CFE?
La opaca TI navega con bandera de “organización de la sociedad civil global en su lucha contra la corrupción”. ¿Cuándo los elegimos quienes somos miembros de la sociedad civil global?
Réseau Voltaire exhibe que “su función consiste en favorecer en definitiva la globalización económica y abrir mercados a las empresas trasnacionales (¡súper sic!), quienes acusan de corrupción a los gobiernos que se les resisten”.
Su “fundador, el jurista alemán Peter Eigen, trabajó durante 25 años en el Banco Mundial (¡súper sic!) antes de ser consultor de la Fundación Ford, la pantalla filantrópica (sic) de la CIA”. Eigen administra ahora a Crown Agents, “literalmente Agentes de la Corona”, que fue “privatizada en 1997 y a cargo de ayudar (sic) a los gobiernos extranjeros en el proceso privatizador”. Crown Agents y Peter Eigen, en calidad de “subtratantes (¡súper sic!) de USAID, participaron en la privatización de la economía iraquí bajo ocupación anglosajona”.
Eigen labora también para Carnegie Endowment for International Peace, “una pantalla de la CIA”. ¿Lo sabrán los hermanos Reyes Heroles, los juniors de la clepto-kakistocracia mexicana en plena putrefacción: Federico en TI y Jesús en Pemex, quienes buscan desmantelar la riqueza energética?
¿Controla ya la CIA a Pemex?
No se puede soslayar el “eje tuxpeño”: la alianza de los Reyes Heroles-Gonzalez-Garza con el subsidiado del Fobaproa/IPAB Roberto Hernández Ramírez, anterior “dueño” de Citigroup-Banamex, que controla directa y/o indirectamente la columna vertebral de México: Pemex-CFE-PGR-Cisen-IFE-Fobaproa/IPAB.
El Cisen se encuentra hoy a cargo del anterior director de la encuestadora GEA-ISSA, propiedad de Jesús, y la única que calculó omniscientemente el 0.56 por ciento del “triunfo” calderonista. El defenestrado mago Ugalde fue “consejero político” de Jesús en la embajada de México en EU, y la mayoría de los parásitos “consejeros electorales” del fétido IFE son “recursos humanos” provenientes de Banamex-Citigroup y el ITAM. Se nos susurra que el tuxpeño Roberto Hernández Ramírez adquirió el importante paquete accionario de Televisa de la esposa del embajador bushiano, el Tex-Mex Tony Garza, quien en fechas recientes ha perdido mucho peso: polítíco y metabólico.
¿Tendrá ingerencia alguna Crown Agents en el “proceso de privatización” de Pemex, en el despliegue de su tercera fase reyesherolista, con sus oleoductos perforados deliberadamente?
No ceja la ferocidad de Réseau Voltaire sobre el oscuro financiamiento de la opaca TI: “NED, USAID, Fundación Soros (but of course!), Fundación Ford” y una pléyade de trasnacionales petroleras, como BP-AMOCO, Exxon-Mobil y Shell “cuya integridad es legendaria”. Es decir, las entidades más corruptas del planeta son quienes emiten certificados de buena conducta mediante la opaca TI.
Por cierto, la Fundación Ford financia el departamento de relaciones internacionales del ITAM, que dirige el castañedista Rafael Fernández de Castro, también “consejero” del disfuncional Instituto de Migración que preside la panista poblana Cecilia Romero, suegra de César Nava, secretario particular de Calderón, para cerrar el (sin)energético círculo vicioso.
Da flojera ahondar sobre los vínculos de George Soros y la CIA (desnudado por Boris Abramovich Berezovsky, el oligarca ruso-israelí cobijado en Londres). No está demás insistir en más bibliografía (v. gr. Neil Clark, The New Statesman, 2/6/03) sobre George Soros, quien presuntamente controla a Jorge Castañeda Gutman, otro palafrenero de la privatización de Pemex y demoledor de la diplomacia mexicana en la aciaga fase foxiana de alfombras voladoras martianas. Soros es un sólido inversionista del Grupo Carlyle (del nepotismo dinástico bushiano), cuyo representante en México es Luis Téllez Kuenzler, antecesor de Jesús, no el nazareno, sino Reyes Heroles Jr., en la Secretaría de Energía zedillista (por aquello de las sinergias).
La opaca TI “dispone de filiales en un centenar (sic) de países. La más importante es la de EU (nota: ¿no será más bien la de México, por aquello de la propedéutica privatizadora?), cofundada por dos personalidades de perfil remarcable (sic)”: Frank Vogt y Michael J. Hershman.
Vogt, “ex funcionario del Banco Mundial, y apologista de la globalización, trabaja ahora en American Enterprise Institute con su amigo Paul Wolfowitz”. Sin comentarios.
“Hershman, anterior funcionario de espionaje militar, fue el segundo en USAID y dirige la unidad antiterrorista de la Cámara de Comercio de EU.” No lo dice Réseau Voltaire, pero Hershman es el presidente del siniestro Fairfax Group, dedicado al “espionaje privado (sic) global”.
A confesión de partes relevo de pruebas. Los recientes documentos desclasificados de la CIA, “Joyas Familiares” (¡cómo les gustan las “joyas de la corona”!) confirman que “la CIA ha nutrido a USAID con instructores para sus cursos técnicos (sic) de investigación”, es decir, de “contraterrorismo” (págs. 218 y 600-603). Mejor aquí nos detenemos.