La sentencia a tres militares es débil, insiste el obispo
Critica Raúl Vera tardanza de CNDH en el caso Castaños
El centro de derechos humanos de la diócesis de Saltillo, presidido por el obispo Raúl Vera López, calificó de “muy débil” la resolución de un juez de Coahuila sobre el caso Castaños, en la que el juzgador sólo condenó a tres de ocho militares procesados judicialmente por haber violado a 14 trabajadoras sexuales en un bar de la zona de tolerancia de ese municipio en julio de 2006.
En su resolución, el juzgador condenó a 40 años de cárcel a tres soldados por violación, a otro se le encontró culpable de delitos menores (lesiones) y exculpó a cuatro.
Vera indicó que con esa sentencia se comprueba que el Ejército continúa siendo una institución “intocable, que va a poder hacer con la ciudadanía lo que se le antoje”.
Subrayó que si bien la recomendación de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos sobre estos abusos militares es “positiva”, el exhorto se presentó demasiado tarde como para incidir en la reparación de los daños.
Las recomendaciones de la CNDH por los abusos de militares en Michoacán, Sinaloa y Coahuila “cuentan con un aspecto positivo porque une los casos y acredita que los militares van encima de la población civil”, señaló el prelado.
Sin embargo, consideró que en la recomendación 37/2007 –referente al caso de Castaños, Coahuila– a José Luis Soberanes “le faltó documentar más las violaciones sexuales contra las mujeres para que su investigación coadyuvara durante el juicio, sobre todo para evitar (que durante el proceso judicial) las hostigaran”.
Afirmó que el hecho de que sólo se haya sancionado judicialmente a tres militares por esos hechos “es muy penoso”, debido a que, dijo, había 20 elementos involucrados en esos delitos.
Agregó que los abusos no sólo fueron contra las mujeres, sino de las personas que durante los hechos se encontraban en el lugar. “Los aislaron y hostigaron, debería haberse imputado además el delito de secuestro, esas personas estuvieron retenidas por varias horas (en el bar) e inclusive se les torturó física y sicológicamente”, refirió Vera, pues, fueron amenazados con armas de uso militar.
Expresó que ante la “debilidad” de la sentencia del juzgador de Coahuila, duda que se pueda hacer justicia, pues ahora la defensa de los militares acudirá al recurso de apelación de la sentencia.