Repudio de Naciones Unidas
El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas condenó el ataque con coche bomba en Beirut que mató al diputado libanés Antoine Ghanem y a ocho personas. “Condenamos este nuevo atentado con bomba, un nuevo intento de desestabilizar Líbano en este periodo tan crucial”, declaró a los periodistas el embajador de Francia ante el organismo, Jean-Maurice Ripert, quien preside este mes ese mecanismo.
Por su parte, el presidente estadunidense, George W. Bush, condenó el “horroroso” atentado en Beirut y advirtió sobre cualquier tentativa de Irán y Siria de desestabilizar esa nación.
“Estados Unidos rechaza en los más duros términos este ataque, y continuaremos apoyando a los que en Líbano luchan por un país libre y democrático”, indicó el portavoz de seguridad nacional de la Casa Blanca, Gordon Johndroe.
“Desde octubre de 2004, ha habido una constante en los asesinatos y en las tentativas de asesinatos políticos destinados a intimidar a los que trabajan con coraje para un Líbano soberano y democrático”, dijo a su vez la portavoz de la Casa Blanca, Dana Perino.
Mientras, la jefa de la diplomacia de Estados Unidos, Condoleezza Rice, acusó indirectamente a Siria del asesinato y dijo que las elecciones libanesas, a realizarse en seis días, deben llevarse a cabo “sin la amenaza e injerencias exteriores y de la violencia que acompaña a tales injerencias”.
Siria condenó “firmemente” el atentado y denunció un “acto criminal” contra los esfuerzos sirios por “la unidad” libanesa, según la agencia oficial Sana, en tanto que la Unión Europea, Francia e Inglaterra manifestaron su repudio.