Los conservadores consideran el hecho una amenaza para su cultura
Español, principal idioma extranjero que se habla en hogares estadunidenses
Washington, 12 de septiembre. El número de hogares en Estados Unidos donde se habla un idioma extranjero, en especial el español, aumentó en 8 millones desde 2000, informó la Oficina del Censo de este país.
El aumento implica que actualmente 19.7 por ciento de la población estadunidense mayor de cinco años habla un idioma foráneo, en comparación con el 17.9 por ciento de 2000.
Lo anterior se debe principalmente al aumento de los últimos años en la inmigración latinoamericana, dijeron expertos en demografía que analizaron las estadísticas.
“El crecimiento predominante ocurre en el mundo de habla hispana, pero los idiomas asiáticos también forman parte del fenómeno en Estados Unidos”, dijo a Reuters William Frey, demógrafo de la Brookings Institution, centro de investigación en Washington.
Estados tradicionales para los inmigrantes latinoamericanos, como California, Nuevo México y Texas, tuvieron el mayor aumento en el número de hogares en que se habla un idioma extranjero, dijo la Oficina del Censo en un comunicado.
Uno de cada 10 hogares de California vivió aislado lingüísticamente en los últimos seis años, lo que significa que cualquier persona con 14 años o más en ese grupo demostraba dificultades para hablar inglés, agregó.
Pese a eso, el número no refleja totalmente la realidad, dijo Frey, ya que los hijos de los inmigrantes casi siempre hablan inglés y lo adoptan como su idioma en las generaciones siguientes. “Se ha demostrado que la segunda y tercera generaciones hablan inglés muy bien, y el español pasa a ser una pequeña parte de su lengua”, agregó.
El demógrafo señaló que algunos nuevos destinos para inmigrantes se están transformando en puntos de atracción, lo que ha hecho que aumente rápidamente el número de hispanoparlantes.
“Este grupo forma la principal minoría del país, con 43 millones, en una población de más de 300 millones”. Se estima que viven en el país 12 millones de inmigrantes ilegales, en su mayoría mexicanos.
Muchos de ellos, principalmente los que llegaron en años recientes, no hablan inglés y toman más de un empleo, trabajando por largas jornadas para mantenerse en Estados Unidos y enviar dinero a sus familias en América Latina, lo que dificulta su aprendizaje del idioma.
Grupos conservadores que intentan frenar la inmigración ven una amenaza a los valores y la cultura estadunidenses con la creciente popularidad del idioma español, y argumentan que los latinos se resisten a aprender inglés.
Pese a ello, el número de libros, discos y todo tipo de productos destinados al mercado hispano está en aumento en la nación. Además, es común la señalización pública en español en aeropuertos, oficinas del gobierno y todo tipo de tiendas. “Hablar otro idioma no es necesariamente un retroceso, el bilingüismo es ampliamente visto como un ‘boom’ para una persona o para un país”, dijo Jeanne Batalova, experta en inmigración en el Migration Policy Institute.