Este año 3 legisladores han dejado la bancada del PRD
Diputada perredista de Tabasco regresa al PRI; alega maltrato
Villahermosa, Tab., 30 de agosto. La diputada Delia María Montejo de Dios renunció este jueves a la bancada del Partido de la Revolución Democrática (PRD) en la Legislatura local para sumarse a la fracción del Partido Revolucionario Institucional (PRI), al cual abandonó en 2003 para ser abanderada del sol azteca a la diputación con sede en el municipio de Cárdenas.
En conferencia de prensa, la legisladora argumentó que dejó las filas perredistas como resultado del “maltrato verbal” que recibió del dirigente estatal de ese partido, Juan Manuel Fócil Pérez, así como del coordinador de la fracción, Adán Augusto López Hernández.
Montejo de Dios fue duramente criticada por sus ahora ex correligionarios, quienes le reprocharon su participación en un acto público del tricolor celebrado hace dos semanas, en el cual se le entregó un reconocimiento a la profesora Australia Escayola, madre de José del Carmen Escayola, coordinador de los diputados locales priístas.
El PRD local, en voz de su secretario general, Rodrigo Sánchez, calificó a Delia María Montejo de “malagradecida”, porque abandonó el PRD luego que éste le dio la oportunidad de contender por una diputación local, lo cual le negó el PRI durante sus 10 años como militante.
La renuncia de Montejo de Dios es la tercera de la bancada perredista en lo que va del año. De los 17 legisladores con que empezó ese partido en la actual Legislatura, en enero pasado, sólo le quedan 14, mientras que el PRI suma 19 y el Partido Acción Nacional (PAN), dos.
Los primeros en renunciar (en enero) fueron la diputada por el municipio de Paraíso, Roselia López, y el legislador por Centla, José David Ascencio Arellano, a quienes la dirigencia del PRD acusó de afiliarse al PRI para salvarse de que se auditaran las cuentas de sus respectivos ayuntamientos.
López encabezó el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) en Paraíso, y Ascencio fue presidente municipal de Centla durante el trienio 2003-2006.
López y Ascencio alegaron en su momento que dejaron el PRD porque el sol azteca había perdido sus ideales en la entidad, y en sus filas existe un permanente divisionismo.