Fracasa la propuesta de efectuar una falta colectiva
Repudian miles en el Zócalo política laboral
Con numerosa participación, pero casi nula respuesta a la convocatoria de realizar una falta colectiva, afiliados a la Unión Nacional de Trabajadores (UNT) y al Frente Sindical Mexicano (FSM) expresaron ayer su repudio a la política económica y laboral del gobierno calderonista, manifestaron su rechazo a las reformas estructurales y expresaron su apoyo al Sindicato Nacional de Trabajadores del Seguro Social (SNTSS) en la lucha por impedir que se afecte su contrato colectivo de trabajo.
En vísperas de que Felipe Calderón entregue su primer Informe de gobierno, miles de personas, que marcharon del Ángel de la Independencia al Zócalo capitalino, repudiaron la política “antisindical y antiobrera” del gobierno federal y dejaron en claro que “no ha habido cambio” alguno, pues se continúa aplicando una “política neoliberal y privatizadora”.
Como ha ocurrido en todas las ocasiones en que dichos gremios han llamado a realizar paros nacionales, faltas colectivas o huelgas nacionales, ayer no fue la excepción y dicha acción se diluyó, pues no pararon labores telefonistas ni electricistas, ni tampoco se llevaron acciones de este tipo en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) ni en las escuelas dependientes de esta casa de estudios.
Cabe destacar que este año la UNT, a veces en conjunto con el FSM han convocado, también a paros de labores en marzo, abril, mayo y junio, en demanda de un salario de emergencia, en apoyo al gremio minero y en contra de la Ley del ISSSTE, así como de la política económica nacional. En todas esas oportunidades, las protestas se han desfigurado.
Los que ayer sí pararon fueron 550 afiliados al Sindicato Unico de Trabajadores de la Industria Nuclear (SUTIN), es decir, casi 90 por ciento de la plantilla laboral: desde temprano se manifestaron en diversos puntos. Primero, a las afueras del Centro Nuclear Nabor Carrillo Flores y luego en la Secretaría de Energía.
Cabe destacar que también integrantes del Sindicato de Trabajadores de la UNAM (STUNAM) realizaron una protesta frente a oficinas de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público en Insurgentes Sur. Allí, Agustín Rodríguez, líder del gremio, anunció que a partir del próximo 4 de septiembre el sindicato instalará un plantón a las afueras de la Cámara de Diputados para demandar que se dé marcha atrás a la nueva Ley del ISSSTE.
A las 16 horas partió la marcha hacia el Zócalo, que fue encabezada por Rodríguez, Francisco Hernández Juárez, líder de los telefonistas, y Valdemar Gutiérrez Fragoso, secretario general del SNTSS. De acuerdo con cifras de autoridades policiacas, participaron en las marcha unas 20 mil personas, aunque algunos de los organizadores calcularon que la cifra rebasaba los 50 mil. Hasta antes de la lluvia que cayó por la tarde, la Plaza de la Constitución se veía concurrida. El mayor contingente fue el del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), cuyos integrantes no sólo lanzaron consignas contra el gobierno federal, sino también echaron porras a su líder, Martín Esparza Flores, el cual llegó minutos antes de que comenzara el mitin rodeado de un importante grupo de trabajadores que lo custodiaban y que impidieron el acceso al templete hasta a los representantes de los medios de comunicación. Esta situación fue remediada minutos después.
Según fuentes ligadas a la dirigencia del SME, uno de los contingentes más exiguos fue el de telefonistas. “Nos dicen que son apenas 141”, aseguró a los reporteros presentes uno de los informantes.
En la UNAM, pese al anuncio de que los trabajadores realizarían una falta colectiva para exigir la abrogación de la Ley del ISSSTE, las actividades académicas se realizaron con normalidad, pues desde las siete de la mañana las escuelas, facultades, institutos y centros de investigación llevaron a cabo sus labores de manera normal.
Pese a lo anterior, Agustín Rodríguez sostuvo que de los 25 mil trabajadores del STUNAM realizaron la falta colectiva 24 mil 200. “Sólo desempeñó sus actividades normales el personal de vigilancia y del servicio médico”.
El líder planteó que el propósito de la protesta de ayer no era realizar una acción contundente, “sino un paso que unifique las acciones sindicales, porque creemos que es más importante una acción unitaria, por lo que vamos por la huelga nacional”, aunque no aclaró fecha para tal efecto. Hace unos meses, Rodríguez convocó a que las universidades públicas realizaran hoy un paro de labores de 24 horas, propuesta de la que se desdijo al inicio de esta semana ,con el argumento de que no existían las condiciones para ello.
El mitin en el Zócalo concluyó poco antes de las 19 horas. El primer orador fue Artemio Ortiz, de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, quien recordó que hoy esa organización llevará a cabo el cuarto paro cívico, al que –dijo– se sumarán cien mil escuelas públicas. Llamó a dejar de usar celulares una hora, de las 13 a las 14 horas, y a que por la noche “apaguemos la luz en todo el país” para repudiar las reformas estructurales.
Posteriormente tomó la palabra Gutiérrez Fragoso, quien expuso que el SNTSS hará todo lo que esté a su alcance para que no se “mutile” el contrato colectivo de trabajo del Seguro Social, “tal como quiere Molinar Horcasitas”.
Carlos Pavón, representante del sindicato minero, exigió al titular de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social “dejar su oficina e ir a las minas para que constate las condiciones de inseguridad en que se trabaja”; además, le reclamó “dejar de estar del lado de Grupo México”.