Comienza actividades el 24 de septiembre en la sala Miguel Covarrubias de la UNAM
Unir a todas las artes, propósito del festival Música y Escena 2007
Vanguardia musical y recursos multimedia se desplegarán para atender a todos los públicos
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Unos cuantos piquetitos, concierto escénico a partir de Frida Kahlo, es una de las cuatro propuestas que se presentarán este año
Foto: José Jorge Carreón
El Festival Internacional Música y Escena llega este año a su versión número nueve con cuatro propuestas que confirman su vocación de presentar piezas de música contemporánea que convivan con las artes escénicas, relación que también funciona a la inversa.
En esta ocasión, aun cuando se redujo su presupuesto a 1.5 millones de pesos (la cuarta parte de lo que se destinó el año pasado), se presentan Soundscape, música para percusiones, arte visual y animación en tiempo real, con el grupo mexicano Tambuco y el creador de origen armenio Kevork Mourad; Laberinto, espectáculo de ballet plástico para niños; Unos cuantos piquetitos, concierto escénico a partir de Frida Kahlo, y Lumínico: la conciencia sonora, que es nada menos que un concierto para flauta solista, electrónica, percusión, poesía y video, con la participación del músico Ganesh Anandan, de India.
A punto de cumplir 10 años, el festival mantiene sus orígenes: "tratar de unir más a las artes, no sólo las escénicas, sino las artes en general; tratar de incluir la nueva tecnología, que se conozcan los artistas y también hacer un repertorio nuevo en México y crear nuevos públicos. Esa idea se ha enriqueciendo de muchas maneras", señala a La Jornada Ana Lara, directora del certamen.
Más que un festival
Pero esto no se queda sólo en un festival. Este año se trabajará con la asociación civil Conarte, por medio de la cual se invita a niños de primaria del Centro Histórico, generalmente hijos de vendedores ambulantes, al ensayo general de la obra para niños Laberinto.
Y aun cuando no se ha iniciado oficialmente el festival, ya comienzan a surgir ideas para el siguiente, el décimo, que se realizará en 2008, para el cual se organiza una subasta de arte el 4 de septiembre en la Galería Lourdes Sosa.
"Si realmente podemos hacer el próximo como me imagino -agregó Lara-, tiene que ser un festival que resuma el trabajo que hemos hecho a lo largo de dos lustros: teatro musical donde hay una parte actuada y una musical muy importante y, por supuesto, espectáculos infantiles, obras clásicas del repertorio del siglo XX vistas desde una nueva perspectiva.
"El programa hasta ahora es muy ambicioso; vamos a ver hasta dónde nos lleva la realidad, pero quiero que sea un momento significativo para conmemorar estos 10 años de trabajo."
Por lo pronto ya comenzó el montaje de las cuatro obras de este año, entre ellos una especie de homenaje a Frida Kahlo, un dibujo que cobra vida, un ballet para niños y otra preparada para abrir los cinco sentidos: Unos cuantos piquetitos, dirigida por Mauricio García, que habla también sobre la pintora mexicana.
"Es una obra que fue comisionada por un festival en Holanda, hace año y medio. Cuando me lo propusieron dije 'no me late'; tenía un prejuicio muy grande, porque todo el mundo estaba con Frida Kahlo y yo decía 'ya no'. Hace unos años hice una obra sobre ella, pero era de sátira, y ahora pensamos hacer algo que se aparte del cliché de Frida y hablar de las resonancias que nos genera a los creadores escénicos."
Esta obra, explicó el director, "es un concierto escénico con música contemporánea mexicana; se trata de un texto de Ximena Escalante, que no es la biografía de Kahlo, sino pequeñas escenas casi aisladas. Es un espectáculo de defragmentación, de carnicería, como sería en todo caso la pintura de Frida".
Lumínico, en tanto, es "hacer evidente a través de música, textos, poemas, imágenes abstractas, esos elementos de los que no estamos conscientes: en términos biológicos serían las células, los átomos, las cosas que sabemos que existen pero que no podemos ver.
"En términos sociales serían los conflictos en tierras lejanas, guerras, Medio Oriente, es decir, que tanto a escala social como biológica hay todos estos elementos. Aquí la clave es la conciencia, es un ejercicio de reflexión consciente", expresó Alejandro Escuer, uno de los creadores de esta obra.
Mónica Sánchez, autora de los poemas, subrayó que en Lumínico "la música es el centro; las imágenes, así como los poemas, refuerzan lo que está ocurriendo en la música. Escribí los textos pensando en este concepto de la conciencia y del conocimiento de las cosas que percibimos, y cómo es importante, para conocer algo, tener los cinco sentidos bien despiertos".
Comienzo del festival
La obra que inaugura el festival es Soundscape, con Tambuco y el artista Kevork Mourad. Un juego de sonidos, pinceles; un dibujo creado en escena que de repente cobra vida gracias a la animación en un evento escénico, en el que "el público va a percibir los elementos comunes entre lo visual y el sonido", señala el director Ricardo Gallardo.
En el caso de Laberinto, este ballet plástico descansa en pintores como Kandinsky y Mondrian, y con él continúa uno de los objetivos centrales del festival: acercar a los niños al arte, a la música contemporánea y, de paso, crear público para el futuro.
El festival se inicia el próximo viernes 24 de septiembre. Las funciones se realizarán en la sala Miguel Covarrubias del Centro Cultural Universitario, de la UNAM. Informes en la página electrónica: www.musicayescena.org.