Aumenta la cifra de mexicanos en riesgo por ciclones
Alrededor de 20 millones de personas residen en zonas sensibles a los huracanes, fenómenos cuya frecuencia se ha duplicado en décadas recientes.
Entre 1970 y 2005 ocurrieron 150 ciclones tropicales, de los cuales 59 fueron huracanes, según información de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
El huracán Dean es el primero de categoría 5 que toca territorio nacional en 19 años. El anterior fue Gilberto, que impactó Cancún en 1988.
Después de estos dos fenómenos, los huracanes más severos se han presentado durante esta década y han sido de categoría 4: Wilma, en octubre de 2005, afectó a Cancún; Kenna llegó a San Blas, Nayarit, en 2002, y Emily impactó el norte de Tulum, Quintana Roo, en 2005.
El documento Estrategia nacional de cambio climático revela que los cinco fenómenos más severos y costosos durante 2005 fueron los huracanes Wilma, que dejó en México, Estados Unidos y el Caribe 42 muertos y pérdidas económicas por 18 mil millones de dólares; Katrina provocó en Estados Unidos la muerte de mil 322 personas y pérdidas por 126 mil millones de dólares; Rita también golpeó al vecino del norte, causó 10 fallecimientos y la pérdida de 16 mil millones de dólares, mientras que Stan afectó a Centroamérica y Chiapas, provocó la muerte de 840 personas y dejó daños valuados en 3 mil millones de dólares.
En México, señala el documento, tanto los factores de exposición como los de vulnerabilidad frente a eventos hidrometeorológicos extremos han aumentado, pues en años recientes se incrementaron las precipitaciones medias anuales en la zona noroeste, la frecuencia y severidad de las sequías en la zona centro-norte, las depresiones tropicales en la región caribeña y el Golfo de México, y se ha intensificado la fuerza de los huracanes.
Las lluvias, más peligrosas
Agustín Breña Puyol, catedrático de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) y experto en fenómenos hidrológicos, afirmó que otro riesgo asociado a los huracanes son las intensas precipitaciones pluviales, que no sólo afectan las zonas costeras
Aseguró que en México los huracanes que se convierten en depresiones tropicales pueden generar aguaceros ''enormes en muy pocas horas, y con ello generar graves riesgos de inundaciones, deslaves, desbordamientos de presas y ríos, así como daños en la infraestructura urbana''.
El especialista consideró preocupante la falta de un mapa de riesgos hidrológicos y de políticas de prevención. La población de la costa, dijo, está más informada, pero en ciudades como el Distrito Federal, Guadalajara o Monterrey se desconocen los riesgos, ''situación que se agrava por la falta de un sistema de drenaje adecuado".
En las ciudades densamente pobladas, insistió, ''debemos estar preparados para afrontar los efectos de huracanes y ciclones porque no sería la primera vez que sus efectos se dejaran sentir con lluvias intensas''. Advirtió que el huracán Dean no sólo afectará la península de Yucatán y la costa del Golfo. ''Sus efectos se harán sentir con fuertes lluvias en otros estados y en el Distrito Federal''.