Otorgan su beneplácito a sus respectivos diplomáticos
México y Venezuela dan un paso más para regularizar relaciones
Los gobiernos de México y Venezuela otorgaron los beneplácitos a sus respectivos embajadores designados hace dos semanas para restablecer las relaciones diplomáticas, que desde noviembre de 2005 se redujeron a nivel de encargados de negocios.
De esta manera, el venezolano Chaderton Matos y el mexicano Mario Chacón Carrillo se encaminan a ser los embajadores en una nueva etapa en las relaciones diplomáticas entre ambos países. Aunque la designación del mexicano está pendiente de la aprobación del Senado, se considera que su comparecencia será de mero trámite.
La retirada de los embajadores se produjo en noviembre de 2005, después de varios desencuentros y ataques verbales recíprocos entre el entonces presidente de México, Vicente Fox, y su homólogo venezolano, Hugo Chávez, provocados por posturas diametralmente opuestas ante el Acuerdo de Libre Comercio de las Américas (ALCA).
En este intercambio de ataques verbales, Chávez respondió llamando a Fox “cachorro del imperio”, por defender el ALCA propuesto por Estados Unidos y el presidente George W Bush.
Fox decidió retirar el reconocimiento al embajador venezolano Vladimir Villegas y llamar a su embajador en Caracas. Los gestos mutuos de enemistad e insultos entre los presidente siguieron. Además, en la campaña presidencial de Felipe Calderón se recurrió a la imagen de Chávez para denostar a su adversario del Partido de la Revolución Democrática, Andrés Manuel López Obrador. El propio presidente venezolano señaló que la relación entre ambos gobiernos había sido difícil de recomponer debido a “la poca ética” de la campaña electoral panista.
La situación se mantuvo luego de que en el Foro Económico de Davos (Suiza) Calderón se manifestó en contra de los planes venezolanos y de otras naciones latinoamericanas basados en la nacionalización de sectores estratégicos, lo que llevó a Chávez a acusarlo también de “subordinado” a Washington.
Pero desde la llegada de Calderón al poder, ambos gobiernos realizaron, por medio de sus cancillerías, las negociaciones para la normalización diplomática, que hoy prácticamente está consumada con los respectivos beneplácitos.
La semana pasada, al anunciar al nuevo embajador de Venezuela en México, el presidente Chávez sostuvo: “las heridas van sanando y uno no puede estar alimentando odios y rencores, mucho menos cuando uno es jefe de Estado y tiene responsabilidad con el pueblo”. Por su parte, la secretaria de Relaciones Exteriores de México, Patricia Espinosa, ha señalado que con estas designaciones se abre una nueva etapa en las relaciones diplomáticas, en las que ambos gobiernos están dispuestos a trabajar de manera permanente dentro los marcos institucionales y a resolver, por los canales adecuados, cualquier diferencia que pueda presentarse.