Avanza rumbo al Caribe y la península de Yucatán
Dean alcanza categoría 2
Se ubica a 3,300 kilómetros de las costas de Quintana Roo
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Trabajadores de las brigadas contra el dengue recorren las calles de la colonia Las Cruces en Acapulco para fumigar estanques, recipientes de agua y casas, con el fin de prevenir la reproducción del mosco transmisor de esta enfermedad, la cual se intensifica en temporada de lluvias; la Secretaría de Salud en Guerrero reporta unos mil 200 casos de dengue en el estado
Foto: Javier Verdín
Dean, primer huracán de la temporada en el Atlántico, alcanzó ayer categoría dos en la escala Saffir-Simpson, con un índice de peligrosidad "fuerte" y vientos de 155 kilómetros por hora y rachas de 185 kilómetros por hora, avanza rumbo al Caribe y la península de Yucatán.
El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos informó que el meteoro puede incrementar su fuerza y podría atravesar la península de Yucatán a partir del próximo lunes. Según el Servicio Meteorológico Nacional, Dean se ubica a 3 mil 300 kilómetros al este de las costas de Quintana Roo y a 335 kilómetros al este de Barbados.
La tarde de ayer, el gobernador de Quintana Roo dirigió un mensaje a los ciudadanos del estado, recomendando mantener la calma y no hacer caso de "rumores", ya que el meteoro aún no representa peligro para las costas de la entidad.
Después de indicar que se mantiene la alerta azul, anticipó que el sábado se podría definir la trayectoria de Dean, por lo que la mañana de este viernes el Consejo Estatal de Protección Civil se instalará en sesión permanente.
Mientras está latente la posibilidad de que Quintana Roo sea impactado por dicho huracán, ayer fue relevado el mayor Nemecio Medina Robledo como titular de la Dirección Estatal de Protección Civil y en su lugar fue designado Luis Carlos Rodríguez Hoy.
En tanto, el Sistema Estatal de Protección Civil de Tabasco declaró alerta roja ante el avance de Dean y aseguró que las autoridades locales tienen listos mil 300 albergues en 17 municipios del estado para albergar a 100 mil damnificados.
Dejan precipitaciones diversos daños en Chiapas, Guerrero y Sonora
Al menos 25 familias de las comunidades de Flor de Cacao y Quetzalcóatl, municipio de Benemérito de Las Américas, Chiapas -en la selva Lacandona-, fueron desalojadas debido a que el nivel del agua del río Salinas estaba al máximo a causa de las fuertes lluvias en la región, informaron autoridades de Protección Civil. Agregaron que 10 hectáreas sembradas con maíz resultaron afectadas. Las precipitaciones pluviales recientes, principalmente en la zona rural alta de los municipios costeños, han incrementado los cauces de los 12 ríos del área, entre ellos el Coatán, por lo que las autoridades declararon estado de alerta, mientras que la capitanía de puerto cerró la navegación a embarcaciones tiburoneras.
Cientos de personas que habitan en las riberas del río Coatán salieron de sus casas la madrugada de este jueves y hasta sacaron camas y colchones ante el temor de que el afluente se desbordara. Las aguas arrastraron troncos, palos y piedras, provocando estruendo, lo que alertó a los lugareños.
La Unidad de Protección Civil de Guerrero confirmó que las lluvias de las últimas horas provocaron daños en los municipios de Ajuchitlán del Progreso, San Miguel Totolapan y Arcelia, y en la capital, Chilpancingo.
Según la dependencia, en Ajuchitlán del Progreso el desbordamiento del arroyo que cruza la cabecera municipal inundó 35 viviendas, de las cuales 15 presentan daños en mobiliario y enseres domésticos, y también una escuela primaria y un jardín de niños; asimismo, encharcamientos en el tramo de carretera Ajuchitlán-San Miguel Totolapan.
En Arcelia, un derrumbe invadió un carril del tramo de carretera Arcelia-San José Poliutla, municipio de Tlapehuala, y el deslizamiento de una roca sobre la cinta asfáltica obstruyó la carretera Arcelia-Ciudad Altamirano.
En Chilpancingo, un cerro se desgajó y las piedras y el lodo cayeron sobre cuatro viviendas del fraccionamiento Villas el Parador del Marqués, que construye el Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Educación.
En Hermosillo, Sonora, fuertes vientos y lluvias provocaron desperfectos en semáforos y luminarias, por lo que cientos de familias se quedaron sin energía eléctrica durante la noche del miércoles y las primeras horas del jueves, soportando temperaturas cercanas a los 40 grados centígrados sin aire acondicionado.
Con información de Javier Chávez, René Alberto López, Sergio Ocampo, Elio Henríquez, Rodolfo Villalba, Ulises Gutiérrez y Notimex