El trámite fue el acostumbrado, pero "falló la comunicación"
Participación de Marisela Arizmendi en gimnasia se decidió de último momento
Marisela Arizmendi, integrante del equipo de gimnasia que fue descalificado en los Juegos Panamericanos por una "falla administrativa", aseguró que su participación en Río 2007 fue decidida de última hora y su registro fue el acostumbrado, y en su consideración "no hay un culpable real, sino la falta de comunicación".
Arizmendi es la única de las gimnastas que permaneció en la ciudad de México, donde está su centro de entrenamiento bajo las órdenes de Emilio Sagré, mientras la mayoría del equipo nacional, dirigido por Antonio Martínez Barraza, se trasladó a Monterrey -donde se integrará más adelante- para continuar la preparación rumbo al Mundial de Stuttgart, del 9 al 11 de septiembre.
A la llegada del equipo, la noche del jueves, Arizmendi, que en un estado de nerviosismo abandonaba a toda prisa el aeropuerto capitalino, manifestó que desconocía por completo la situación.
Sólo sabía, según comentó a este diario, que Alejandro Peniche, titular de la Federación Mexicana de Gimnasia, les había solicitado las medallas para "sacarles unas copias".
Ayer, durante una entrevista con Estadio W, la gimnasta detalló lo sucedido con su acreditación, y sobre todo reiteró su confianza en que el percance no afecte la preparación para el Mundial, pues la atleta de 23 años mantiene el objetivo principal de clasificar a Pekín 2008.
Arizmendi, quien ganó un puesto a los Panamericanos, admitió que no había sido considerada en el grupo de las seis titulares, y que viajó por la continuidad del proceso rumbo al Mundial.
Su participación se produjo a consecuencia de la lesión de Cynthia Duhart, pero nunca se imaginó que el trámite para habilitarla tendría una consecuencia lamentable, pues desde un principio portaba un gafete AF, de cuya clasificación (apoyo técnico) ni siquiera se percató. "El problema fue que el comité panamericano era el único que no tenía el cambio".