La ciudadela inca ''podría destruirse por el apetito mercantilista'', advierte
Alerta arqueólogo de los riesgos que se ciernen sobre Machu Picchu
Lima, 10 de julio. Las advertencias sobre el futuro de Machu Picchu y las amenazas a su conservación abundaron el lunes en Perú tras las celebraciones populares y de las autoridades por la elección de la milenaria ciudadela inca como una de las nuevas siete maravillas del mundo.
La inquietud sobre el porvenir que espera a la joya de la corona del turismo peruano se basa en estimaciones oficiales de visitantes diarios para los meses siguientes: 5 mil en vez de los actuales mil 800, algo considerado crítico por especialistas.
La voz de alerta la lanzó el arqueólogo Luis Lumbreras, ex responsable del Instituto Nacional de Cultura, quien advirtió de un riesgo de destrucción de Machu Picchu incentivado por el apetito mercantilista de las industrias envueltas en la elección de las nuevas maravillas.
''Existe el peligro de su destrucción, de su maltrato", dijo Lumbreras citado por el diario La República.
Lumbreras defendió las críticas de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) a la elección, porque la misión de esa instancia consiste en ''impedir el excesivo entusiasmo mercantil en relación con el atractivo que puedan tener" los lugares que son Patrimonio Cultural de la Humanidad, como la ciudadela inca.
El diario Perú.21 publicó un mapa del Instituto Geológico, Minero y Metalúrgico con 10 zonas de la ciudadela en las cuales se indica que las rocas graníticas usadas en su construcción ''están muy fracturadas y corren el riesgo de desplomarse si no reciben el mantenimiento adecuado".
En la mira de la UNESCO
Machu Picchu tiene capacidad para recibir 2 mil 500 visitantes diarios, pero no al mismo tiempo. En marzo de 2007 el Instituto Geológico, Minero y Metalúrgico sugirió reducir a cinco días por semana las visitas de turistas para reducir los riesgos de un deslizamiento.
''Este galardón implica también una gra-ve responsabilidad, pues se trata de un legado que pertenece a todos y es obligación conservarlo en las mejores condiciones para las generaciones venideras", afirmó el diario La República en su editorial.
''Machu Picchu exige excepcionales cuidados, sin los cuales podría desaparecer o deteriorarse de modo irreversible", informó el diario.
Las autoridades del Cusco, donde se localiza Machu Picchu, señalaron que desde hace meses analizan la posibilidad de incrementar el numero de visitas diarias de un modo racional, según dijo Jean Paul Benavente, jefe de la Dirección Regional de Turismo, citado por el diario El Comercio.
Desde 2006, la UNESCO observa con lupa el estado de conservación de Machu Picchu, debido a la construcción de un puente en una zona cercana que ha puesto en peligro su condición de Patrimonio Histórico Cultural de la Humanidad. Ese año, en su reunión de Lituania, acordó evaluar las medidas del gobierno peruano alrededor de la ciudadela inca antes de ponerla en una lista de riesgo.