Se cambiará la ley para que paguen más impuestos y atajar actividades ilícitas
Aumentará el control a casas de juego, dicen en SG
Ante el auge de los bingos y la captación millonaria de ingresos en este tipo de negocios en México (principalmente salas de sorteos de números), el gobierno federal prepara cambios a la ley y al reglamento de juegos y sorteos, a fin de atajar actividades ilícitas, como el lavado de dinero.
Actualmente, los permisos autorizados por la Secretaría de Gobernación (SG) contienen sólo algunos enunciados en ese sentido, y no cuentan con una estructura amplia para detectar prácticas ilegales, pese al boom de este tipo de entretenimiento a partir de la autorización colectiva de licencias, en 2005.
De acuerdo con información oficial, la Dirección General Adjunta de Juegos y Sorteos de la SG opera con una plantilla de apenas 52 inspectores en "activo", quienes deben vigilar la correcta operación de casi 300 establecimientos.
Del total de negocios en funcionamiento, 165 son centros de apuestas remotas (CAR) de actos deportivos, y 126 salas de sorteos de números (SSN) -identificadas popularmente como yaks, por el nombre comercial de la cadena más grande en su tipo-, así como un número indefinido de cruces de apuestas en cuatro hipódromos (tres cuentan con galgódromos), un frontón y siete negocios de libros foráneos.
Lo anterior, sin contar la vigilancia que debe aplicar Gobernación en cientos de sorteos de todo tipo autorizados cada año, además de las tradicionales peleas de gallos, carreras de caballos y actividades en ferias regionales.
Además de la escasa plantilla de inspectores, la dependencia no tiene actualizada la información financiera de cada uno de los permisionarios, como establecen la ley y el reglamento de juegos y sorteos. Al menos aún no es información pública, pese a que cambió y actualizó su página en Internet, al corte de junio.
Las únicas cifras medianamente actualizadas se refieren a las aportaciones al erario que -como se ha difundido- corresponden a entre 1 y 2 por ciento del total de ingresos por apuestas recabadas y venta de tarjetas de sorteo de números.
En la lista de permisionarios continúan aumentando (por el número de establecimientos abiertos o el nivel de participaciones al erario reportado) las empresas de Jorge Hank Rhon, presidente municipal de Tijuana con licencia, quien defiende en tribunales su candidatura a la gubernatura de Baja California.
El hijo del extinto político priísta Carlos Hank González posee varios permisos por medio de diversas empresas, entre las que se encuentran el Grupo Caliente, Jomaharaho y Libros Foráneos, principalmente.
Por ejemplo, Hipódromo Agua Caliente, con permiso inicial en 1973, entregó en 2005 participaciones a la Tesorería de la Federación por 31.7 millones de pesos, 46.4 millones en 2006, y en el primer trimestre de este año ya había reportado 18.8 millones, casi la mitad por SSN.
Por ese mismo concepto, en 2006 Apuestas Internacionales, de Televisa Juegos y Grupo Televisa, reportó 3.9 millones de pesos, y de enero a abril de este año 6.6 millones.
De enero a mayo de este año, el permisionario puntero en este giro, Administradora Mexicana de Hipódromo (dueña de los Yaks), entregó al erario 6.3 millones de pesos por SSN, pero reportó 4 millones de "premios no cobrados".
Pese a las cantidades millonarias que corren en los bingos, Gobernación sólo incluye en los permisos un apartado que señala "(los permisionarios) deben denunciar ante las autoridades competentes e informar a la SG cualquier conducta o práctica de los usuarios que pueda considerarse probablemente constitutiva de delitos relacionados con la delincuencia organizada o de operaciones con recursos de procedencia ilícita".
Más gravamen
En la iniciativa de reforma fiscal del Ejecutivo -entregada la semana pasada al Congreso de la Unión- fue incluido un aumento de impuestos para los permisionarios del sector en referencia, al pasar de un ínfimo pago actual de entre uno y dos por ciento, a 20 por ciento de sus ingresos.
El nivel propuesto -señalaron a La Jornada fuentes de la Secretaría de Hacienda y del Servicio de Administración Tributaria- tiende a acoplarse con los parámetros internacionales de contribución al erario de los propietarios de casinos y negocios similares.
"El aumento de las participaciones (de los permisionarios mexicanos) se hace necesario ante la expansión de este tipo de establecimientos", tras la autorización colectiva de permisos en 2005, comentaron los funcionarios consultados.