Paris Hilton llora y no duerme al volver a la cárcel
Los Angeles, 9 de junio. Paris Hilton volvió a la cárcel la noche del viernes, ahora bajo vigilancia médica.
La joven no ha comido ni dormido desde que llegó a la sala médica de una prisión de Los Angeles, "estuvo llorando mucho, rezando" y está "extremadamente retraída," y además es tratada con medicamentos sicoactivos, informó el sábado el sitio web de las celebridades TMZ.com, citando fuentes legales.
Apenas 36 horas después de su liberación, el juez Michael Sauer no quiso aceptar las llamadas "razones médicas" argumentadas para dejar libre a Hilton, y ordenó que volviera a ingresar en prisión.
El juez basó su decisión en la ausencia de una prueba médica que justificara la liberación de la joven. En la sala de audiencia, Sauer reclamó a una llorosa Hilton que le informara sobre sus problemas de salud, pero la respuesta de la joven no lo convenció.
El sábado, sin embargo, la orden del juez también generó controversia, con expertos de televisión y otros debatiendo si había abusado de su autoridad al desestimar a Lee Baca.
El comisario Baca, a su vez, desmintió que Hilton recibiera un trato de privilegio. La política de la prisión prevé liberar antes a internos con delitos menores para evitar la saturación de las instalaciones: "normalmente no habría pasado ni un día en nuestra prisión", aseguró Baca.
El programa televisivo Entertainment Tonight aseguró el jueves en su página web que el problema de salud de Hilton fue un sarpullido que apareció en su cuerpo. El canal Court TV indicó que tuvo un problema sicológico y que apretaba continuamente el botón de asistencia médica de su celda.
El fiscal de Los Angeles, Rocky Delgadillo, quien solicitó la audiencia del viernes ante la Suprema Corte de la ciudad, dijo la noche del jueves que estaba "muy consternado" por su liberación.
Delgadillo manifestó que le preocupaba que el "proceso judicial haya sido enredado de manera impropia" porque las cárceles de Los Angeles están "bien equipadas" para tratar los problemas médicos de los prisioneros.
"No podemos tolerar un sistema de doble parámetro donde los ricos y poderosos reciben trato especial", indicó el fiscal, que hoy saludó la decisión del juez.