Cinco ejecutados a balazos en Michoacán, Oaxaca y Sinaloa; indaga CNDH tiroteo
Sicosis en Monterrey por rumores de narcoataque
Una versión de que presuntos sicarios del narcotráfico atacarían bares y antros del centro de Monterrey, Nuevo León -adonde acuden los fines de semana cientos de jóvenes del área metropolitana-, ocasionó gran movilización policiaca y que los establecimientos estuvieran semidesiertos durante la noche del viernes y madrugada de ayer.
El gobernador del estado, José Natividad González Parás, consideró que estos rumores pudieran ser una "estrategia del crimen organizado para chantajear a ciertos giros o negocios, que incluyen a los casinos y algunas actividades vinculadas con negocios de esparcimiento nocturno".
La versión difundida por correo electrónico surgió de una joven que dijo ser hija de un médico que atendió a un sicario, quien en agradecimiento por el buen servicio advirtió al galeno que si tenía hijos no los dejara salir a la calle el fin de semana.
Según la menor, el pistolero reveló que serían atacados bares y antros del Barrio Antiguo de la ciudad, que "dejarán marcada a Monterrey", porque serían mucho más cruentos que los ocurridos hasta ahora.
El temor entre los jóvenes y padres de familia creció debido a que la policía recibió llamadas anónimas advirtiendo sobre supuestas balaceras en los bares y antros conocidos como Bar Río, El Zócalo, Ocean Drive, Alebrijes y Los Rieles.
Durante la noche del viernes y madrugada del sábado hubo una gran movilización policiaca en el primer cuadro de la ciudad; incluso al mediodía de ayer fue visto un contingente de la Policía Federal Preventiva en labores de patrullaje.
González Parás señaló que estas acciones pudieran tener como propósito chantajear a los dueños de los negocios y amedrentar a la autoridad o a la sociedad, pero dijo que "hay que hacerles frente y no ceder", pues "no se puede vivir en sicosis permanente".
Dispositivo sorpresa
Por otra parte, la Policía Ministerial de Michoacán efectuó un operativo sorpresa en los municipios de Huiramba y Lagunillas, aledaños a Morelia, donde han sido localizados en las últimas semanas varios hombres ejecutados, entre otros, un empresario y su hijo.
Los agentes instalaron un filtro de revisión en la autopista Morelia-Pátzcuaro, a la altura de esos municipios, donde inspeccionaron unos 150 vehículos. Nueve personas fueron detenidas por delitos menores, entre ellas José Luis Saucedo, quien tenía en su poder una pistola calibre .25 y 40 cartuchos útiles.
La dependencia reportó además que fue encontrado el cuerpo de un hombre calcinado envuelto en una cobija sobre una brecha de la comunidad de Santa Rosa, el municipio de Uruapan. La víctima, aún no identificada, presentaba varios impactos de bala.
En el municipio de Tlazazalca fue hallado el cadáver de Enrique Ceja Rangel, asesinado de dos disparos de rifle AK-47 en la espalda. El hombre fue levantado (secuestrado sin intención de pedir rescate) en Toluquilla, Jalisco, donde residía.
En Tuxtepec, Oaxaca, un joven identificado como José Balderas Rodríguez fue localizado ejecutado en el fraccionamiento Costa Verde, luego de que sus familiares denunciaron que había sido levantado.
La Secretaría de Seguridad Pública municipal indicó que el cuerpo del joven, de 24 años, fue encontrado en una camioneta Ram blanca de doble cabina. El estudiante del Instituto Tecnológico de Tuxtepec recibió varios impactos de bala.
En Culiacán, Sinaloa, la Policía Ministerial informó que en la colonia Libertad, desconocidos ultimaron a tiros a Ernesto Beltrán Barraza, de 29 años, por la calle octava y séptima, durante la tarde de este sábado.
En otro hecho, presuntos sicarios ejecutaron a una persona identificada como Saúl Pérez Calderón, de 45 años, cuando viajaba en una camioneta Chevrolet blanca de modelo reciente y fue alcanzado por los tripulantes de un vehículo tipo sedán quienes le dispararon sobre la marcha con armas calibre 9 milímetros.
También en Sinaloa, personal de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) investiga un enfrentamiento ocurrido el mes pasado en el municipio de San Ignacio entre militares y presuntos narcotraficantes, que dejó dos personas muertas.
Familiares de Carlos Villa Quintero, quien murió en la balacera y fue señalado como presunto narcotraficante, informaron a La Jornada que visitadores del organismo se entrevistaron el pasado miércoles con las siete personas detenidas luego de la refriega.
El 31 de mayo pasado, elementos del Ejército ordenaron detenerse al conductor de una camioneta de redilas que viajaba sobre la carretera México 15, frente a la comunidad de Coyotitán, pero sus tripulantes respondieron a balazos. En el lugar murieron el militar Juan Carlos Aguilar Burgeño y el presunto sicario Carlos Villa.
Militares detuvieron a seis personas en la colonia Miguel Alemán de Culiacán, donde vivía Carlos Villa, pero horas después fueron dejados en libertad "bajo reservas de ley". Inicialmente se informó que les habían encontrado armas y droga, aunque nunca se especificó cantidad ni tipo de armamento.
Con información de Notimex