Acusaciones entre Olmert y Haniyeh por guerra de los 6 días
Londres, 6 de junio. El primer ministro iraelí, Ehud Olmert, afirmó que en 1967 "Israel peleó una guerra no deseada para defender su existencia misma, y hoy todavía hay líderes que desean que sea borrado del mapa", mientras su par palestino, Ismail Haniyeh, aseguró que "cuando los líderes israelíes lanzaron su guerra expansionista no previeron que 40 años después se verían acosados por las consecuencias", en sendos artículos publicados hoy por el diario británico The Gurdian.
En Jerusalén, en tanto, la radio militar informó que una organización de colonos judíos construye unas cien viviendas en Cisjordania a pesar de los compromisos adquiridos ante Estados Unidos de congelar la edificación de asentamientos ilegales en los territorios palestinos reocupados.
Olmert afirmó en su artículo que "la victoria israelí" en la Guerra de los Seis Días, del 5 de junio de 1967, "nos demostró a nosotros mismos y al mundo que no íbamos a ser borrados del mapa tan fácilmente".
Durante esa guerra Israel ocupó Cisjordania y el sector Oriental de Jerusalén, así como la franja de Gaza, territorio que abandonó en 2005. Además, la península egipcia del Sinaí, que devolvió con la firma de los acuerdos de paz de 1982, y las alturas del Golán, cuya devolución exige Siria como condición para la paz.
De su lado, Haniyeh escribió que la ocupación de todos esos territorios "fue presentada al mundo como la victoria de David sobre Goliat, y en las dos décadas que siguieron la experiencia palestina fue ahogada por la arrogancia israelí". Indicó que fue hasta 1987 cuando "el mundo despertó a la realidad de un levantamiento palestino, la intifada".
Agregó que las dos décadas transcurridas, desde la primera intifada -la segunda comenzó en 2001-, confirmaron que los palestinos "permanecerán arraigados a su tierra sin importar el precio, y ejercerán el legítimo derecho de resistir la ocupación".
En una reunión del gabinete de seguridad, Olmert expresó hoy que Israel está interesado en la paz con Siria y ya se lo hizo saber por canales diplomáticos.
De otro, lado, el presidente palestino, Mahmoud Abbas, pospuso la cumbre con Olmert, que debía realizarse mañana en Jericó, hasta que se cumplan ciertas condiciones, como la liberación de los ingresos fiscales palestinos.
En tanto, el ejército israelí mató a dos palestinos.