Busquen ser felices y buenas personas, dice Calderón
Legisladores infantiles exigen un país seguro
Asegura que su gobierno lucha contra el "monstruo" del narcotráfico para que los niños crezcan contentos
Ampliar la imagen El presidente Felipe Calderón durante la reunión en Los Pinos con integrantes del Parlamento infantil Foto: María Meléndrez Parada
Durante un encuentro con el presidente Felipe Calderón en la residencia oficial de Los Pinos, integrantes del Parlamento de las Niñas y los Niños de México 2007 pidieron un país más seguro, sin narcotráfico y corrupción, pero "sobre todo con igualdad y justicia".
Ante esta solicitud, el Ejecutivo calificó al narcotráfico como un "monstruo, un ogro que se dedica a esclavizar a los niños y a los jóvenes", y aseguró que a través de las drogas, "les ponen a cada quien una cadena invisible" que los esclaviza en torno a ese "monstruo, a ese dictador, a ese tirano que es, precisamente, el narcotraficante".
Luego de contar un "cuento" en el que las drogas son una cadena "de la que nunca se pueden desprender, porque está hecha para que dependan de ella", incluso los puede llevar a la delincuencia, señaló que en su niñez el narcotráfico "no era un tema que a los niños se nos tratara, casi no se nos hablaba de eso", pero reconoció que hoy en día los niños "lo escuchan, lo ven en las noticias y se preocupan", por eso, les recomendó que "sigan siendo como son: buenas niñas y niños, estudiando, trabajando, queriendo mucho a México, esa es la tarea que les toca".
En su mensaje, aseguró que los menores de edad puede hacer muchísimo para enfrentar a los "enemigos de México" si nunca aceptan la cadena, la esclavitud de las drogas y las adiciones, y afirmó que hay un gobierno que lucha por la seguridad y "cuando fortalece a su policía, cuando se apoya en el Ejército, cuando hace todo lo que hacemos todos los días por reforzar la seguridad, es fundamentalmente para que las niñas y los niños de México estén seguros en su casa, en su escuela, en su pueblo, en su ciudad, y puedan crecer y ser felices".
Al enumerar los compromisos de su gobierno en materia de enseñanza, afirmó que la Secretaría de Educación Pública y los maestros se deben "aplicar" para que los niños mexicanos "no se sientan mal ni sean menos" cuando se comparen con otros jóvenes del mundo, y aseguró que "vamos a demostrar que los mexicanos somos igual o mejores que cualquiera en el mundo"; reiteró que "nunca se sientan menos y sepan que siempre hay que poner a México bien en alto".
Tras señalar las metas en materia de salud, combate a la pobreza, generación de empleos y medio ambiente, solicitó el apoyo de "todos los niños" para hacer de México un país "mejor, más limpio y seguro", y los exhortó a que "nunca dejen de querer a nuestro gran país y de esmerarse para ser buenos hijos, estudiantes y mexicanos".
Cuando hablaba de las profesiones que podrían desarrollar en un futuro, como medicina, biología, antropología, abogacía etcétera, una de las diputadas del parlamento infantil le reclamó: ¡y también presidentas!; ante esto contestó que "ojalá todos aspiren a eso, a que un día sean diputados federales o locales. México necesita buenos legisladores y ustedes ya lo son".
Por ello, los exhortó a que siempre "busquen ser felices y buenas personas, porque la gran tarea del ser humano no es ser médico o enfermera o presidente, es ser un buen ser humano", y agregó que si alguno sentía la vocación de "servir a México" y ser algún día presidente de la República, "tampoco tengan miedo y búsquenlo con honestidad, con claridad, y si lo logran, hagan todo lo que dé su corazón y su alma por el bien de México".