Convoca el Tribunal Electoral a elecciones para la Constituyente en septiembre
Cesa el Congreso ecuatoriano a magistrados del TC que restituyeron a 51 diputados
Fiscal pide el arresto por "sospecha de sedición" de 24 de los legisladores restituidos
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El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, rechazó ayer la detención de 24 de los 51 diputados restituidos por el Tribunal Constitucional
Foto: Ap
Quito, 24 de abril. El Congreso unicamaral cesó hoy de sus funciones a los nueve miembros del Tribunal Constitucional (TC), que ayer restituyó a 51 de los 57 diputados destituidos el 7 de marzo pasado por Tribunal Supremo Electoral (TSE), fallo que también fue rechazado por el presidente Rafael Correa que lo calificó de "una barbaridad".
A su vez, el Tribunal Electoral de Ecuador convocó este martes a elecciones para designar a los 130 asambleístas que integrarán la Constituyente, el próximo 30 de septiembre.
De otro lado, un fiscal pidió este martes el arresto de 24 de los 51 diputados restituidos bajo el cargo de sospecha de sedición, mientras el presidente Correa expresó su oposición a estas detenciones por considerar que "podría abonar la tensión política" que vive el país.
La crisis política se remonta a la aprobación del TSE el pasado 1º de marzo de la convocatoria a una consulta popular el 15 de abril para dar paso a la Asamblea Constituyente con plenos poderes, incluida la posibilidad de revocar el mandato de los congresistas que se extiende hasta 2011, como lo defiende Correa.
El Congreso unicamaral, integrado por cien escaños, todos en manos de la oposición, reclamó que la iniciativa debió ser aprobada por esa instacia, y cinco días después destituyó al presidente de la corte electoral, Jorge Acosta y decidió enjuicar a cuatro vocales del TSE.
La corte electoral destituyó un día después, el 7 de marzo, a los 57 legisladores que removieron a Acosta y ordenaron el enjuciamiento de los vocales.
El mandatario, quien este martes cumplió 100 días de gobierno con una aprobación de 90 por ciento, logró el 15 de abril que se aprobara por mayoría en consulta popular la instalación de una Asamblea Constituyente que impulsa para reformar el Estado a fondo y tratar de revertir las políticas neoliberales.
"Queridos compatriotas, en el país no pasa absolutamente nada. Esos 57 diputados continúan destituidos", afirmó el mandatario, mientras las inmediaciones del Congreso se volvían a llenar de manifestantes que apoyan al gobierno, quienes fueron reprimidos con gas lacrimógeno tras advertir que no permitirán el reingreso al Parlamento de los destituidos.
Los simpatizantes de Correa irrumpieron en la sala del TC y persiguieron a los vocales incluso en la cocina anexa al lugar, por lo que tuvieron que ser auxiliados para evitar una agresión.
"Es una nueva jugarreta de la partidocracia. Se han roto todos los procedimientos, pero lo más importante es que esta apelación no impugna un fallo del Tribunal Supremo Electoral, que ratificó la destitución de los diputados el 28 de marzo", sostuvo Correa.
El fallo del TC en favor de los legisladores destituidos por el TSE, por oponerse a la consulta popular, fue cuestionado por el propio vicepresidente del organismo, Tarquino Orellana, quien denunció que el texto fue adoptado sin cumplir los procedimientos de ley.
Rodeado de un fuerte dispositivo de seguridad policial, el Congreso sesionó este martes sin los diputados restituidos, y con sus representantes suplentes cesó con 52 votos a los nueve magistrados del TC.
"Hemos procedido -a la destitución- porque los nombramientos -de los jueces- ya habían vencido, estaban prorrogados y teníamos que hacerlo", señaló el vicepresidente del órgano, Byron Pacheco, quien negó que sea una represalia por la restitución de los opositores.
EL TC será reorganizado con las ternas de aspirantes que enviarán el gobierno y la Corte Suprema de Justicia, explicó.