Asegura que están inactivas 56% de los 39 millones de cuentas existentes
Es un horror la reforma a las Afore, dice García Sainz
El cobro de comisiones por saldo a las cuentas individuales del Sistema de Apara el Retiro (SAR) será superior en la mayor parte de los casos a las aportaciones que realizan los trabajadores, advirtió Ricardo García Sainz, ex director general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
"Es un horror", exclamó al referirse a las modificaciones aprobadas a la Ley del SAR por los diputados de los partidos Revolucionario Institucional (PRI) y Acción Nacional (PAN). Se trata, dijo, de "una especie de necropsia para que vean las Afore qué cobran y dónde cobran".
Al intervenir en la presentación del libro Efectos económicos de los sistemas de pensión, coordinado por Berenice B. Ramírez López y Roberto Ham, García Sainz señaló que de los 39 millones de cuentas que manejan las administradoras de fondos para el retiro (Afore), más de 22 millones se encuentran inactivas, lo que significa que sus titulares han dejado de realizar aportaciones y sólo 12 millones se encuentran activas.
El nuevo sistema de cobro de comisiones aprobado implicaría en la práctica el desvanecimiento paulatino de esos recursos, que pasarían progresivamente a formar parte de las propias empresas administradoras.
"Es una masa informe de recursos de la cual se desconoce cuál será su destino", pero el cambio de comisiones por saldos implica un incremento exponencial, anticipó.
Ricardo García Sainz, quien se desempeñó como subdirector general del IMSS de 1964 a 1976 y director general de la institución de 1983 a la mitad del gobierno de Carlos Salinas de Gortari, explicó a investigadores, catedráticos y alumnos de la unidad Azcapotzalco de la Universidad Autónoma Metropolitana que en la situación actual "está en riesgo la seguridad social. Tenemos -puntualizó- que tomar decisiones sobre si las personas deben recibir protección y a qué edad".
Manifestó que "estamos frente a un problema particularmente grave y severo. Está en juego la salud y el bienestar de muchos millones de personas".
Y definió su posición personal: "no veo que por la vía sindical se pueda renegociar esta situación".
Desde hace años se había vislumbrado adecuar el sistema de pensiones, pero desaprobó el cambio instrumentado desde 1992 para modificar el sistema solidario por otro de beneficio definido y de carácter individual. "El SAR se inventó de la nada en 1992 y ahora los riesgos hacia la seguridad social se multiplican cuando los legisladores del partido gobernante y del PRI aprueban de la noche a la mañana, por fast-track, cambios al sistema de jubilaciones de los trabajadores al servicio del Estado. Lejos de hacer un análisis serio de lo que es factible dentro de bases sustentables, se aprovechó incluso un día feriado -el 21 de marzo- para aprobar estos cambios en un dictamen elaborado en menos de 24 horas", señaló.
El libro Efectos económicos de los sistemas de pensión reúne investigaciones multidisciplinarias y trabajos de especialistas que apuntan a la necesidad de revisar a profundidad los cambios introducidos al sistema pensionario mexicano.
García Sainz, quien participó como subdirector del IMSS durante los años de auge de esta institución, expresó que "no puedo ser ajeno a más de 20 años de mi vida", y manifestó: "espero que la sociedad adquiera conciencia de lo perdido en las instituciones de los últimos 25 años".