"Todo un fraude", la causa contra el ex agente de la CIA, afirma Noam Chomsky
Trampa para no juzgarlo por terrorismo, la liberación de Posada Carriles, dice Cuba
Ampliar la imagen Estudiantes con fotos de las víctimas del atentado al avión de Cubana, en 1976, se manifiestan en La Habana contra la liberación de Posada Foto: Ap
La Habana, 19 de abril. En reacción inmediata tras la liberación bajo fianza de Luis Posada Carriles, Cuba repudió la decisión judicial y acusó al gobierno del presidente George W. Bush de haberla facilitado, al evitarle al prisionero un juicio por terrorismo y en cambio imputarle sólo una infracción migratoria.
"Todo es una trampa para no juzgarlo ni dejar que lo juzgue otro país por terrorismo", dijo a la televisión local el líder parlamentario Ricardo Alarcón.
Ahora que Posada está en una vivienda en Miami, "que vayan a buscarlo, que procedan contra un terrorista o quedará claro lo que todos sabemos: que lo estaban protegiendo y lo van a seguir protegiendo cada vez más", agregó.
Un programa especial en la televisión y sendas manifestaciones de protesta en esta capital y en Bayamo, en el extremo oriental de la isla, acentuaron esta tarde la sensibilidad con que se sigue aquí este caso.
Aunque es abundante y conocido públicamente el historial delictivo de Posada, los cubanos evocan con mayor fuerza tres episodios de los cuales es el instigador confeso y que fueron ataques directos contra la isla: el sabotaje al avión civil, en que murieron sus 73 ocupantes en 1976; los atentados a centros turísticos en 1997, en que falleció un italiano, y el intento de asesinar a Fidel Castro en Panamá, en noviembre de 2000.
Alarcón sugirió que el móvil de Washington para evitar un juicio por terrorismo es que el proceso se volvería contra el actual mandatario y contra su padre, el ex presidente George Bush, quien fue director de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) en la época en que Posada Carriles era un operador de ese cuerpo.
"Estamos profundamente indignados", dijo Camilo Rojo, hijo de Jesús Rojo, un funcionario de la aerolínea Cubana de Aviación, que murió en el vuelo saboteado frente a las costas de Barbados. "Esperamos el apoyo internacional a la reacción que está teniendo Cuba. Vamos a protestar por esta decisión de proteger a un terrorista".
El gobierno estadunidense "nada hizo para detener la orden judicial que abrió las puertas de la prisión al execrable criminal", dijo un comentario de la televisión.
Añadió: "Se ha querido disfrazar con manto jurídico la infame decisión que desde el primer instante tomó la administración Bush. La Casa Blanca ha tenido siempre las llaves de la cárcel del terrorista".
El comentario fue leído al final de la Mesa Redonda Informativa, la revista televisiva diaria que refleja las prioridades de la agenda oficial y que en esta ocasión canceló su emisión para volcarse al caso Posada.
Aseguró también que el momento de la liberación del anticastrista se hizo coincidir deliberadamente con la conmoción nacional en Estados Unidos por la matanza de Virginia: "Se aprovechó la desgracia para tratar de invisibilizar la libertad del terrorista. Se trafica bochornosamente con el dolor del pueblo estadunidense y con el dolor por más de 30 años de los familiares de las víctimas de los actos criminales de Posada".
El escritor y académico estadunidense Noam Chomsky, en una declaración al programa de la televisión cubana, dijo que la causa contra Posada "fue todo un fraude: equivale a detener a alguien por violar las leyes del tráfico, cuando es uno de los principales terroristas internacionales".