Amorcito corazón también se escuchó en Mérida
Merida, 15 de abril. Los amigos de Pedro Infante celebraron hoy el 50 aniversario de la muerte del ídolo de mexicano en la zona donde en 1957 cayó el avión que piloteaba.
A muy temprana hora se ofició una misa en recuerdo de Pedrito y posteriormente comenzó la pachanga por el rumbo de la calle 66 Sur, el sitio donde se encuentra la estatua del popular intérprete. Decenas de coronas de flores, mariachis, cantantes improvisados, venta de discos, carteles y una gran comilona, remataron la celebración.
La comida ofrecida por los vecinos del rumbo por una módica cuota fue al estilo del inmortal Pedrito: los guisos que el cantante solía degustar cuando iba a Yucatán a descansar.
Y así, en medio de sus melodías, principalmente Amorcito corazón, los visitantes recorrieron las calles aledañas al sitio donde Pedro Infante falleció. Algunos vecinos, como Abraham Quintal, recordaron que el avión que tripulaba Infante, nativo de Sinaloa, se precipitó en el patio de una casa y ocasionó la muerte a otras tres personas.
Fueron varias horas de emotiva convivencia, en la que la gente bailó, cantó, lloró y recordó a su ídolo. A coro, sus admiradores exclamaron "¡Pedro Infante no ha muerto!" La policía destinó a varios patrulleros para hacer una valla motorizada en honor del cantante y actor. Por allí se escuchó: "parece que va a llover, el cielo se está nublando, ay mamá, me estoy mojando".