Representantes de Pekín acuerdan con el gobierno capitalino regularizar mercancías
Autoridades chinas se comprometen a combatir la piratería que llega al DF
El GDF buscará que empresarios orientales inviertan en acciones de vivienda
Tras suscribir una carta de intención con el Gobierno del Distrito Federal con miras a regularizar la mercancía que llega a la ciudad de México procedente de China, Tang Long "pronunciador" oficial de la alcaldía de Pekín, señaló que el gobierno chino reconoce la fabricación de mercancía pirata como un problema existente en aquel país que es necesario combatir, por lo que su gobierno emprenderá acciones para abatir estas actividades ilegales.
El gobierno chino está en contra del contrabando y protegerá la propiedad intelectual, "tomaremos medidas para abatir estas actividades ilegales, lo cual requiere de la cooperación entre ambos gobiernos" dijo Long, quien en entrevista con este diario señaló que dichas medidas serán aduaneras y de control de exportación.
Interrogado respecto a que la clonación china de productos mexicanos ha llegado a la fabricación de imágenes religiosas, como la virgen de Guadalupe, el funcionario oriental indicó que además de llamar la atención al público en este sentido, "también se tiene que llamar la atención a los gobiernos".
Sin embargo, dijo, estos últimos tienen que tomar medidas para impedir que esto pase, "cualquier gobierno enfrentándose a este problema tomará sus medidas para controlar el suceso de la actividades ilegales" apuntó.
El secretario de Gobierno, José Angel Avila, quien suscribió el documento en representación del jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard, dijo que el objetivo de la carta es regularizar el intercambio comercial con China e incentivar la inversión de aquel país en la ciudad de México.
En entrevista consideró que "el éxito que ha alcanzado esa nación en el mundo debe verse como una realidad positiva regularizando el intercambio comercial y aprovechando las ventajas que esto ofrece para colocar los productos mexicanos en el continente asiático" indicó.
Durante su visita a China como jefe de gobierno electo, Ebrard, planteó este proceso de hermanamiento, "la propuesta es que próximamente el alcalde de Pekín venga a la ciudad de México y se celebre aquí el convenio de hermanamiento entre ambas ciudades".
A su vez la vicealcaldesa de Pekín, Zhai Hongxiang, propuso negociar acciones anuales en materia de turismo, infraestructura urbana, calidad del aire, jardinería urbana e intercambio deportivo. Asimismo dijo que es posible intercambiar múltiples productos en la industria manufacturera y comercial, campos rentables en los que los inversionistas deberán analizar oportunidades.
Entrevistado tras participar en la firma de la carta de intensión, el secretario de Desarrollo Social Arturo Aispuro, señaló que la iniciativa privada tiene las "puertas abiertas" para la inversión china en este rubro.
Respecto a cuánto podrían invertir en el DF, dijo que dependería de las evaluaciones del mercado que los propios empresarios chinos realicen, no obstante el potencial de vivienda y la necesidad misma de casas habitación, "justifica la inversión local y la posibilidad de inversión extranjera" apuntó.
El gobierno local proyecta 200 mil acciones de vivienda durante el sexenio, la mayor parte corresponden al mejoramiento de vivienda y otro porcentaje destinado a vivienda nueva indicó.
Sobre vivienda nueva hay un gran intercambio internacional, "la ventaja que tienen los chinos es que la construcción masiva que están realizando les permite producir viviendas a menor costo".
Una de las características de las viviendas que construyen, es que en los conjuntos habitacionales nuevos incorporan áreas de descanso para adultos mayores, jardines para niños y áreas de esparcimiento.
El GDF planea construir vivienda social "justamente con esos componentes de equipamiento social y rescate del espacio público, tema en el que particularmente los chinos, por su antecedente comunista, ponen como ingrediente a sus desarrollos habitacionales".
Actualmente se han iniciado pláticas con todos los desarrolladores privados para que los conjuntos que se construyan con capital privado sigan el esquema del espacio público de la ciudad como eje rector de su diseño e incorporen el equipamiento social y comercial en las nuevas zonas habitacionales.