Anuncia que el tricolor convocará a reunión para elaborar nueva política agrícola
Los campesinos priístas no cambiarán votos por migajas: Paredes Rangel
La dirigente nacional del PRI, Beatriz Paredes Rangel, rechazó la convocatoria que se hizo a las organizaciones campesinas para elaborar un nuevo programa para el sector, y anunció que su partido efectuará "una gran reunión" para definir otra política agropecuaria y evitar que se pueda expandir la "estrategia azul" hacia las zonas rurales.
Ayer, Paredes Rangel advirtió que el sector campesino priísta no tendrá una actitud clientelar ni permitirá que le den migajas a cambio de votos. Posteriormente, enfatizó que el tricolor y la Confederación Nacional Campesina (CNC) no permitirán que se busque revertir la federalización agropecuaria.
"No se trata de administrar el campo como si fuera feudo", advirtió la priísta al gobierno de Felipe Calderón, y se pronunció por reivindicar una política agropecuaria participativa y revitalizar el movimiento de emancipación indígena, al tiempo que defendió como propiedad de la nación el campo y los hidrocarburos.
Ante cientos de campesinos reunidos en la sede nacional del PRI, Paredes Rangel destacó "el legado revolucionario en la lucha campesina", el cual, expresó, dio origen al partido. Añadió: "no puede ser motivo de regocijo el que millones de campesinos expongan sus vidas, abandonen a sus familias y dejen sus parcelas por un modelo neoliberal, que en su fracaso ha generado la migración de los trabajadores del agro".
En un encuentro convocado para fortalecer la alianza entre el PRI y su sector campesino, la presidenta nacional de ese partido se dio tiempo para responder a los analistas políticos que critican al tricolor por no haber definido su posición ideológica como de izquierda, como ofreció Paredes en su campaña por la dirigencia partidista.
Les manifestó que el PRI es un partido democrático, y que el tema genera gran debate. Más aún, subrayó, porque los jóvenes reclaman una ideología progresista.
Así transcurrió la reunión, en la cual la Confederación Nacional Campesina reculó de su intento por abandonar el Revolucionario Institucional y renovó su alianza a cambio de que el partido le mantenga cuotas para candidaturas al Congreso.
Paredes advirtió a la CNC que si quiere más posiciones políticas, deberá ser más competitiva electoralmente. Pidió a quienes aspiran a un cargo de elección popular, que de inmediato se sumen a las tareas de planeación y trabajo, para encontrar una fórmula que les permita tener mayor margen de competencia, con lo que frenó las aspiraciones de los líderes campesinos.