El cinefotógrafo ofreció un curso junto con Angel Goded en el festival de Guadalajara

La fotografía es la síntesis del trabajo de todos los que hacen una película: Prieto

ARTURO CRUZ BARCENAS ENVIADO

Guadalajara, 1º de abril. "Para acabar pronto, entre el director y el guionista, entre Alejandro González Iñárritu y Guillermo Arriaga, el más importante es el director de... ¡fotografía!" Así, tajante y con buen sentido del humor contestó Rodrigo Prieto a la pregunta sobre las diferencias entre los citados profesionales, dupla desde Amores perros hasta Babel, en la que fue el cinefotógrafo.

No sólo eso. Dijo que a la distancia Amores perros no es parteaguas de nada. "No hay un antes ni un después de esa cinta en el cine mexicano". Para su colega Angel Goded, con quien Prieto sostuvo una plática, la base de una película es el guionista, "pero cuando comienza el rodaje ya todo es cosa del director".

Se trató de un diálogo con jóvenes que se inscribieron en cursos de dirección de fotografía, denominados Escribiendo con luz, realizado en las instalaciones de la Escuela de Imagen y Sonido de la Universidad de Guadalajara, y que fue una de las actividades que destacaron del recién concluido 22 Festival Internacional de Cine en Guadalajara. Prieto y Goded hablaron de su experiencia. Separados por los años, están unidos por el amor a la fotografía de cine. Goded ha trabajado con los grandes directores de cine mexicano, en cintas memorables, como Cobrador, in God We Trust (dirigida por Paul Leduc), que aún nos e estrena.

Para Prieto el trabajo de Goded fue un hallazgo, expuso. "Cuando hice Frida tuve que ver la versión de Goded. Sentí un poco de envidia, por la poesía visual. El y yo hablamos de los distintos presupuestos entre ambas películas".

Goded dijo que él no sabe hablar como Prieto. "Todo el dinero se lo quedan los exhibidores y los distribuidores, los que venden palomitas. Es muy difícil hacer cine en México."

Añadió que aprendió mucho haciendo gran número de comerciales, "donde se paga muy bien. Del cine no se come".

Prieto recordó que lo primero que hizo fue un videohome, "aquí en Guadalajara; estaba en el Centro de Capacitación. Fue en 16 milímetros, algo bastante patético. Cámara, iluminación, tramoya, todo, cabía en una pick-up", expuso el director de fotografía de Brokeback mountain.

"Lo que dice Angel es lo importante: poder iluminar con una fuente de luz. Siempre hay maneras, y tener limitaciones también ayuda. Si no hay dinero, sí debe haber entusiasmo.

"En Alexander me peleé varias veces con el productor, porque no quería conseguir tal o cual lente. Hay que aprender a trabajar... (y) hay que saber pelear por lo que realmente importa y escoger tus batallas. Debes saber qué sacrificar."

Goded intervino: "Los productores no se dan cuenta de que todo lo que hagan los actores, los escenógrafos, los artistas pasa por una cosa que se llama lente, que se registra con una cosa que se llama cámara. Luego se verá en una pantallota. Si se van a lo barato todo saldrá mal. Mientras mejor equipo tengan, habrá mejores resultados, lo cual no quiere decir que la película vaya a ser buena".

Prieto: "Lo más cinematográfico del cine es la fotografía, porque es la síntesis del trabajo de todos".

Añadió: "Cuando Amores perros y otros proyectos, yo ya tenía la inquietud de hacer algo más neto, que tuviera que ver con la realidad que uno ve. Lo importante es el sentimiento del espectador y no una estética equis o ye".

Goded: "La fotografía está al servicio de la película. Sobre lo que te pidan, nunca hay que decir no, sino vamos a ver".

-¿No les gustaría ser directores?

Goded: "No, a mí me gusta la foto, es algo que me ha encantado toda la vida".

Prieto: "La profesión de director de fotografía es para mí la mejor chamba del mundo. Como todo, tiene su precio: el mucho tiempo que le dedicas".

Sobre el estilo, Goded dijo que la fotografía debe ser diferente en cada película. Prieto: "Estoy totalmente de acuerdo. Lo que es inevitable es que tienes un gusto; he hecho trabajos muy distintos y trato de no caer en mis propios estereotipos".

Sobre Amores perros, Prieto contestó que para él es muy importante en su vida. "Rompí mi propio esquema de iluminar y hacer cámara. Llamó mucho la atención y gustó. Cuando hicimos las primeras pruebas de cámara los productores dijeron que se veía muy feo. Tenía el apoyo de Alejandro González Iñárritu, que, a pesar de que era su primera película, tenía apoyo por su trayectoria en radio y televisión. Sigue siendo de mis películas favoritas.

"Lo de si fue un parteaguas, quién sabe. Lo importante es que se vaya creando una industria y que el público vea películas mexicanas. Siento que empieza a darse, pero no creo que Amores perros sea el comienzo, ni nada, la verdad, pero tuve la fortuna de trabajar en ese proyecto."